El Gobierno ha adelantado un año la aprobación de la nueva Estrategia de Seguridad Nacional para adaptar el texto al contexto actual, «caracterizado por una mayor competición geopolítica y un entorno socioeconómico marcado por las consecuencias del COVID, así como por la aceleración de la transformación provocada por la tecnología y la transición ecológica». El Consejo de Ministros ha dado luz verde en su reunión de este martes al Real Decreto por que el se aprueba la Estrategia de Seguridad Nacional. La actual estrategia es de 2017 y la Ley de Seguridad Nacional establece su renovación cada cinco años, pero el exdirector de gabinete de Presidencia del Gobierno, Iván Redondo, ya anunció en junio que se adelantaría su revisión para adaptarla a la actualidad.
El Ejecutivo argumenta que los objetivos de la nueva estrategia son avanzar en materia de gestión de crisis, favorecer la seguridad de las capacidades tecnológicas y los sectores estratégicos y desarrollar la capacidad preventiva, de detección y de respuesta frente a las amenazas híbridas. Entre las nuevas actuaciones, destacan algunas como la modernización del sistema de vigilancia epidemiológica, el desarrollo de un Plan Integral de Seguridad para Ceuta y Melilla, la elaboración de una Estrategia Nacional de lucha contra las campañas de desinformación o la creación de una Agencia Espacial Española con una componente dedicada a la Seguridad Nacional.
Para ello, el Gobierno prevé elaborar un catálogo de recursos de los sectores estratégicos que puedan ser puestos a disposición de las autoridades competentes y redactar planes de preparación y disposición de recursos. También desarrollará un sistema de indicadores críticos para la elaboración de un Sistema de Alerta Temprana y se compromete a adoptar soluciones de inteligencia artificial para la evaluación de la situación de seguridad y el apoyo al análisis estratégico.