Los representantes de las instituciones catalanas han cedido el protagonismo a las víctimas en un emotivo y tenso acto en Barcelona para conmemorar el quinto aniversario de los atentados del 17-A, en el que decenas de personas situadas en los alrededores han roto el silencio al grito de «queremos la verdad» y han abucheado a los políticos.
Con todo el protagonismo para las víctimas, en el acto, celebrado frente al mosaico de Miró en Las Ramblas, en segunda fila se han situado los representantes institucionales, encabezados por el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, los ministros Miquel Iceta y Raquel Sánchez, y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau.
Antes, durante y después de que se celebrara el acto, decenas de personas concentradas en los alrededores han abucheado a los representantes políticos y han gritado «queremos la verdad», «vergüenza» y «vosotros, fascistas, sois los terroristas», mientras mostraban pancartas con lemas como «Reclamamos explicaciones», hasta el punto de que algunos de los concentrados han roto incluso el minuto de silencio gritando: «España es un estado asesino, queremos la verdad, hipócritas». Tal y como aparece en el vídeo adjunto, Laura Borràs de Junts ha ido a saludarles y estos, en respuesta al acercamiento, la han aclamado con gritos de «presidenta».
El apunte
Junts, señalado, rechaza los gritos
Este último hecho ha provocado algunas reacción políticas más. En concreto, Junts per Catalunya ha expresado su «más enérgico rechazo» a la interrupción del minuto de silencio en el acto de homenaje en Barcelona. En Twitter JxCat ha reiterado su apoyo a las víctimas de los atentados y a sus familiares: «Por este motivo, queremos expresar el más enérgico rechazo a la interrupción del minuto de silencio de hoy en la Rambla de Barcelona».
El vídeo de Borràs acercándose a los manifestantes ha provocado un aluvión de críticas, que finalmente han obligado a Junts a desmarcarse de forma pública de los ciudadanos que no han respetado el minuto de silencio en el acto solemne.