La joven sevillana Lucía Castro, víctima de un caso de abusos sexuales saldado con una condena a once años de prisión al autor de los hechos --tío suyo-- y que le ha sido rebajada en virtud de la Ley de garantía integral de la libertad sexual, conocida como la Ley del solo sí es sí, ha hecho un llamamiento a otras víctimas para «hacer piña» y reclamar al Estado una indemnización por daños y perjuicios.
En declaraciones este jueves a Europa Press Televisión, Castro ha vuelto a insistir en sus críticas a la Ley, que ha calificado de «vergüenza» ya que «revictimiza» a las mujeres que fueron víctimas de abusos sexuales. «Es vergonzoso e indignante», ha subrayado. «Creo que es importante que las víctimas nos unamos y hagamos piña para pedir una indemnización por daños y perjuicios», ha señalado, para lo que ha habilitado un correo (afectadas.leysiesi@gmail.com) donde las víctimas «si se sienten preparadas, porque no hay que forzar nada», puedan sumarse a esta iniciativa.
Lucía Castro ha reconocido que es «fuerte y duro» conocer que el condenado por la agresión sexual que sufrió se va a beneficiar de una rebaja de pena. «Revives los traumas», ha abundado. «Intentas hacerte a la idea porque sabes que lo ha solicitado, que es muy probable que se lo concedan viendo lo que está pasando, pero no te acabas de preparar para el momento», ha apuntado. El tío de Lucía Castro fue condenado a once años de prisión por un delito de abusos sexuales cuando ella era menor de edad, concretamente entre sus siete y 13 años de edad.
A las víctimas no les afecta directamente, con lo que no veo a razón de qué van a pedir daños y perjuicios. El juicio se realizó y las condenas se dictaron. Si más tarde ha habido una reforma legislativa que les favorece, pues eso, la ley debe cumplirse. Esta situación no tiene nada que ver con las víctimas, quienes ya recibieron las compensaciones pertinentes en su caso. Lo que sí pueden hacer es campaña para que la gente no vote a partidos políticos que cometen estos fallos legislativos, fallo que creo que con una disposición transitoria se hubiera podido salvar, pero al parecer los de UP la omitieron.