Los mercados llevan unos días acumulando caídas que llevan a algunos inversores a preguntarse si estamos ante una nueva senda bajista, tras un inicio de año bastante bueno. Las bolsas asiáticas y la británica han cerrado en números rojos este jueves. Sin embargo, la española ha repuntado un 0,64 %, tras tres jornadas consecutivas de pérdidas.
Luis García Langa, director de Corredordefondos.com, explica que «llevamos un 2023 espectacular en bolsa, con subidas de doble dígito en muchas de ellas. Si continua todo el año así se traduciriía en serían subidas del 60 %-70 %». No obstante, precisa que «no sería normal una subida tan fuerte y eso ha hecho que a la mínima que se han dado algunas noticias se haya producido un recorte. Este es el caso de algunos comentarios de banqueros centrales advirtiendo que las subidas de tipos no han acabado. Eso, unido a buenos datos macroeconómicos -sí, la irracionalidad a corto plazo de las bolsas hacen que a veces pase eso-, especialmente los índices de actividad empresarial conocidos esta semana».
Langa precisa que bolsas europeas, al tener menos tecnología y más banca, «han sufrido poco; sus caídas no llegan al 3 % de máximos anuales a mínimos». En este punto, destaca que «más fuertes han sido en EEUU, con el Nasdaq perdiendo en pocos días un 6,50 % o S&P un 5,4 0%». En España las empresas que más han caído en una semana han sido Grifols y Repsol, que se han dejado (hasta este jueves por la mañana) un 7,2 % y un 4,8 %; mientras que otra farmacéutica, Rovi, la tecnológica semipública Indra y Telefónica, alentada por los últimos resultados, suben un 5 %; un 2,60 % y 2 %, respectivamente».
¿Vuelven los número rojos?
Preguntado por si vuelven los números rojos a los mercados, el director de Corredordefondos.com responde que «no tiene porqué. Hay dos opciones: un simple recorte para una toma de beneficios en un entorno de fuertes subidas o un recorte hasta los mínimos anuales, coincidentes con el cierre de año pasado. Eso no sería tampoco un desastre, ya que en años muy alcistas de bolsas los movimientos a la baja cercanos o superiores al 10 % se dan varias veces al año. El problema sería que perdiera esos soportes, que sí sería más peligroso».
Ante la situación actual, Langa considera que los inversores deben «respetar su estrategia. En tendencias muy alcistas, las bolsas hacen movimientos de caídas más fuertes que las que están viviendo ahora. A quien invierta a largo plazo no creo que le afecte y quedará en una mera anécdota, incluso cayendo más. De hecho, este es uno de los problemas de los pequeños inversores: venden cuando no deben vender, llevados por el miedo. Además, no suelen tener carteras de inversión muy buenas, lo que tampoco ayuda. Nosotros monitorizamos mucho indicadores de sentimiento y funcionan como 'Ley de Sentimiento Contrario': cuando el pequeño inversor tiene miedo (y vende), entonces las bolsas suelen subir. Precisamente ahora, el pequeño inversor ha entrado en pánico con estos pequeños rebotes».