El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha rendido homenaje este lunes a una veintena de víctimas de la guerra civil y el franquismo en un acto en el que ha asegurado que la memoria democrática es «una cuestión de Estado» y donde han actuado los cantantes Joan Manuel Serrat y Rozalén. «La memoria democrática es una cuestión de Estado, la Ley de Memoria Democrática es una ley de Estado que no concierne a una ideología en particular, por eso es incomprensible que algunos no lo sientan como propio», ha declarado Sánchez en su intervención.
Al inicio del acto, celebrado en el Auditorio Nacional de Madrid, ha actuado sola la cantante Rozalén y al final lo ha hecho acompañada por Joan Manuel Serrat, que ha puesto en pie al público a su llegada al escenario. «Es un día sumamente emocionante, hago mías las palabras del presidente», ha dicho Serrat antes de interpretar 'Para la libertad'. El cantautor ha expresado su deseo de «reducir a ser posible las dosis de olvido a las justas y necesarias y trabajar en ese sentido» porque, en su opinión, «un pueblo que pierde la memoria pierde la llave para abrir la puerta del futuro».
Al acto han asistido familiares de víctimas, miembros de asociaciones de memoria y numerosos representantes del Estado, entre ellos la presidenta del Congreso, Francina Armengol, el del Senado, Pedro Rollán. También han acudido las vicepresidentas en funciones Yolanda Díaz y Nadia Calviño; y la mayoría de ministros, entre ellos Félix Bolaños, María Jesús Montero, Isabel Rodríguez, Miquel Iceta e Ione Belarra. Sin embargo, han declinado asistir el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo; la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso; y el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, han señalado fuentes del Ministerio de la Presidencia.
El homenaje tiene lugar con motivo del día de recuerdo y homenaje a las víctimas, fijado el 31 de octubre en la Ley de Memoria Democrática, pero que ha sido adelantado a este lunes al coincidir este año con la celebración en el Congreso de los Diputados de la jura de la Constitución de la princesa Leonor. En su discurso, Sánchez ha asegurado que es una cuestión de «ignorancia» decir que la Ley de Memoria es «sectaria o revanchista» y ha asegurado que la norma «se va a cumplir». «Soy consciente de que vamos muy tarde (con las políticas de memoria), pero mi compromiso con las víctimas de memoria es rotundo, total y absoluto», ha añadido.
Por su parte, el ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños, ha comentado que acaba de cumplirse un año de la entrada en vigor de la Ley de Memoria, una norma que afirma que «homologa» a España con países de su entorno que «también sufrieron zarpazos de la dictadura». Y ha subrayado que el Gobierno estará del lado de las víctimas y a favor de «la verdad, la justicia y la reparación». Sánchez ha entregado junto a Bolaños 18 declaraciones de reparación y reconocimiento, 17 de ellas individuales y una colectiva a los diez representantes de CCOO condenados a prisión por su oposición al franquismo en el juicio del 'Proceso 1001', celebrado hace 50 años.
Entre las individuales, recogidas en su mayor parte por familiares y representantes de asociaciones de memoria, están las concedidas a la escritora de la Generación del 27 María Teresa León, al historiador Nicolás Sánchez Albornoz y al filósofo José Luis López Aranguren, entre otros. También a la artista y referente de la lucha del colectivo LGTBI Manuela Saborido, conocida como Manolita Chen; al escritor Gabriel Aresti o a la abogada y exdiputada de IU Cristina Almeida, que ha recogido el diploma personalmente. En nombre de las víctimas, ha hablado la sobrina de María Teresa León, que ha manifestado la «honda emoción» por este reconocimiento y la alegría por «vivir en un país capaz de dibujar una imagen más clara y completa de nuestro ayer».