La policía investiga un terrible suceso registrado el pasado fin de semana en un barrio de Liverpool en el que un perro murió a consecuencia de que un grupo de individuos armados con botellas rotas y cuchillos lo lanzara desde el balcón al suelo después de colarse en la propiedad privada.
Los hechos acontecieron, según informa The Daily Mail, en un lugar donde se reúnen habitualmente decenas de personas para consumir alcohol en la vía pública. Cristian Dutu es un joven vecino que está acostumbrado, por desgracia, a lidiar con los efectos de los excesos y a sufrir las consecuencias de los borrachos, pero lo sucedido en última instancia ya clama al cielo.
Según este medio británico todo empezó cuando su madre bajó a la calle para pedir a los congregados que se calmaran un poco. Al parecer montaban un gran escándalo y lanzaban botellas vacías a los coches estacionados. Sin embargo la petición de la mujer no hizo sino alterar aún más a los bebedores.
«Tenemos una terraza junto a nuestro piso, donde mi perro, un bulldog americano mezclado de siete años, a menudo se sienta fuera», explica el damnificado, que narra como «la gente de la calle comenzó a trepar la valla para llegar a nuestro balcón, armada con botellas rotas y cuchillos».
En un momento dado en la terraza aparecieron «unas 10 o 15 personas» y tanto el vecino como su madre resultaron agredidos. El noble can trató de defenderlos y esa fue su perdición. «Lo cogieron por las patas y lo arrojaron desde la terraza a la calle», explica Dutu, aún recuperándose de las heridas y consternado por lo sucedido.
En primera instancia el perro sobrevivió a la caída pero algunos de los que quedaban en la calle se ensañaron con él y empezaron a apalearlo. Cuando su propietario logró ahuyentar a la marabunta violenta y recogerlo para llevarlo al veterinario ya fue tarde.
Ahora la policía de Merseyside trabaja para tratar de identificar a las personas que perpetraron estos condenables actos y a los que se les podrían imputar varios delitos.