Una mujer británica tiene prohibido cantar en su casa durante dos años tras las numerosas quejas de sus vecinos. Heather Webb, de 48 años, recibió una de un año el 5 de diciembre y al incumplirla la sanción ha sido ampliada a dos años.
Sus vecinos han explicado en medios locales el comportamiento incívico de esta mujer. Paul Burford, que vive a 40 metros de su apartamento dijo haber escuchado su «canto errático de ópera» y que sonaba «como un gato que se está ahogando». Otra mujer que vive dos pisos por encima de la denunciada dijo haberla escuchado a pesar de estar viendo la tele con los auriculares puestos: «Cuando lo escuché por primera vez, me quité los auriculares y me acerqué a la ventana para asegurarme el ruido venía desde su piso, y así fue. Viene de ese piso constantemente».
La denunciada, Heather Webb, no compareció ante el tribunal. En declaraciones a la policía la acusada se limitó a decir que bastaría con cerrar las ventanas para que no hubiera problemas con los vecinos, pero este conflicto dura ya casi cuatro años.
Tras múltiples quejas, avisos y ahora denuncias, la mujer deberá guardar silencio durante dos años para no agravar el problema. La orden le prohíbe mantener una conducta que «cause alarma o angustia» y le impide «tocar música, cantar, gritar o crear ruido en un volumen que se pueda escuchar fuera de su propiedad».