Miki, el representante español en Eurovisión 2019 con el tema «La venda», se ha declarado «superorgulloso» del trabajo realizado pese al puesto 22 de 26 cosechado, muy por debajo de las expectativas de partida, que llegaban a situarlo incluso entre los diez primeros.
«Parece que no escarmentamos, yo el primero, diciendo tonterías que si 'top 10' o 'top 5'. Yo creo que nos lo merecíamos, aunque pueda ser egoísta decirlo, porque es la que más ha cantado y bailado la gente», ha afirmado el artista en declaraciones a los medios al término de la gala celebrada en Tel Aviv.
El joven intérprete catalán, que se ha ratificado en el acierto de la puesta en escena ideada por Fokas Evangelinos, ha comentado que sus sensaciones tras la actuación han sido «buenísimas», convencido de que había sido «el mejor pase» de la delegación española en el festival.
«De esta experiencia me quedo con la familia que hemos formado con TVE. Este año no puede haber ninguna queja ni para bailarines y demás equipo que hemos tenido al lado», ha subrayado el cantante en defensa de todos sus compañeros y de la corporación pública.
Núñez, que ha reconocido su predilección por el tema del sueco John Lundvik frente a la del ganador, el holandés Duncan Laurence, ha dicho desconocer las razones de su puesto y ha descartado que actuar en el último puesto, detrás de dos favoritos como Suiza o Australia, pudieran haberle perjudicado.
«Estoy supercansado, no sé si quiero fiesta o cama», ha concluido Miki, que regresará a España mañana mismo, ya que el lunes tiene previsto grabar el videoclip de su nuevo sencillo, aún sin título ni fecha oficial de lanzamiento, y que ha deseado que «la gente cante y baile 'La venda' durante mucho tiempo».