Saltó a la fama hace casi un lustro por ser uno de los participantes que dio más juego en la última edición de Pekín Express, presentada por Cristina Pedroche.
Jonan se presentaba junto a Priscila, su compañera de aventura, como un influencer y experto en las redes sociales. Ha pasado el tiempo y ahora es uno de los influencers más queridos entre la comunidad de internet.
Pero una cosa ha cambiado. El joven ha experimentado una evidente transformación física que deja ver en las muchas publicaciones a las que el valenciano tiene acostumbrados a sus seguidores.
Aunque ya dejó ver en televisión un cuerpo muy fibrado -listo para la extrema aventura que vivió en el formato de Atresmedia-, ahora se muestra mucho más maduro y con un aspecto mucho más trabajado, ganando músculo.
El joven es experto en publicaciones muy sugerentes, solo o en pareja -su chico es Christian Tomás-, y también en dar visibilidad a la lucha LGTBIQ+.