Papá Noel o Santa Claus es uno de los protagonistas de la Navidad, sobre todo, de la noche del 24 de diciembre, cuando recorre las casas repartiendo regalos e ilusión a los niños que se hayan portado bien durante el año.
El lugar donde vive Papá Noel se llama 'La montaña que escucha' porque desde allí el famoso hombre de traje rojo y barba blanca puede escuchar los deseos de todos los niños del mundo.
La historia de Santa Claus comienza en Rovaniemi, en Finlandia, con un joven obispo llamado San Nicolás. Llegada la actualidad, los elfos que ayudan a Papá Noel han construido en este lugar una vivienda llena de magia donde los niños pueden conocer al protagonista del día de Navidad.
«A veces, mis amigos me preguntan '¿cómo se pueden repartir todos los regalos de Navidad en todo el mundo cuando solo dispones de un día o una noche?'», plantea el propio Santa Claus.
Comentando este problema del tiempo con su buen amigo Albert, este se puso a pensar sobre ello, hasta que un día le explicó a Papá Noel: «Escucha, Santa, tengo la solución. El tiempo es relativo».
Que el tiempo sea relativo significa que una sola noche para repartir todos los regalos puede parecer poco tiempo pero, para Papá Noel y todos sus ayudantes, es tiempo más que suficiente.
Estos ayudantes trabajan durante todo el año, sin embargo, cuando llegan las vacaciones de Navidad para todos los niños, los elfos y Papá Noel viven su época de mayor ajetreo con el fin de que todos ellos reciban los regalos y vean cumplidos sus deseos: «Es un tiempo de mucho, mucho trabajo para mí, pero es cuando lo doy todo», dice Santa Claus.
«Recibo millones y millones de deseos desde todas las partes del mundo. A veces, me llegan cartas en las que niños o niñas pequeños me hablan de que conocen a alguien que tiene problemas y me piden que no me olvide de ellos. Este tipo de cartas me llegan al corazón», añade.
«Soy Santa Claus y y a ves que soy bastante real, tal y como me siento», concluye en la entrevista. «Creo en los sueños y en los cuentos de hadas, vivo en el mundo de los cuentos y lo maravilloso. Todos deberíamos disfrutar de una etapa de la vida con acceso ilimitado a este mundo infinito de cuentos de hadas y sueños».