NIU ha presentado en España su nueva serie de patinetes eléctricos KQi 300, que alcanza hasta 60 kilómetros de autonomía e integra en su diseño suspensión hidráulica para deslizarse con facilidad sobre cualquier superficie.
La serie de patinetes NIU KQi 300 ha sido diseñada para facilitar la movilidad en superficies llanas, pero también en las irregulares, con un nuevo sistema de suspensión hidráulico y su capacidad de absorción de impactos.
La compañía ha destacado la potencia del motor de los dos modelos que componen la serie: de 450W en el modelo KQi 300P, que alcanza un rendimiento máximo de 900W; y 500W en KQi 300X, con 1.000W de potencia máxima, como recoge en una nota de prensa.
KQi 300P integra una batería de 486Wh (vatios/hora) que necesita una carga de cinco horas para que esté a su máxima capacidad, ofreciendo una autonomía de hasta 48 kilómetros. En el caso de KQi 300X, la batería de 608Wh necesita seis horas de carga para una autonomía de hasta 60 kilómetros.
Ambos modelos alcanzan una velocidad máxima de 25 km/h y cuentan con frenos de doble disco y un sistema de frenado regenerativo trasero, además, un timbre sonoro, luces brillantes de 360 grados e intermitentes para mantener la visibilidad en todo momento.
Las baterías de la serie KQi 300 cuentan con certificación UL, lo que, según explican desde NIU, garantiza la máxima seguridad y fiabilidad. Además, en el caso del KQi 300X, los neumáticos autorreparables se mantienen en movimiento incluso después de un pinchazo.
Estos patinetes también disponen de funciones conectadas a través de la aplicación móvil, con la que se vinculan mediante bluetooth. Da acceso al control de la batería, el estado del vehículo y el seguimiento del historial de rutas. También permite personalizar la conducción con cuatro modos predefinidos y controles avanzados de límite de velocidad.
Los dos patinetes llegarán a finales de mayo, NIU KQi 300P con un precio de 699 euros y NIU KQi 300X de 799 euros.