Los pequeños inversores, en muchos casos, no saben qué hacer cuando caen tanto las bolsas, aunque esto se podría mitigar a la hora de invertir teniendo muy clara la estrategia a seguir. Siempre debe considerarse el horizonte temporal, nivel de riesgo que se asume, pérdidas máximas que se pueden soportar, capacidad de ahorro para reinvertir, formas de seguir y modificar la cartera.
No se puede ofrecer un consejo genérico ya que variará de las circunstancias de cada persona. Por ejemplo, el que compra acciones a corto/medio plazo no debería estar invertido desde mediados de diciembre, ya que la mayoría de acciones rompieron soportes claves y las pérdidas para este plazo no deben ser soportables. Evidentemente, puede haber alguna excepción e incluso habrá quien utilice posiciones "cortas" o "bajistas" para disminuir riesgo y con estas estén ganando dinero. Si no es así, se ha producido uno de los graves y más frecuentes errores para este tipo de inversores: "convertir una operación a corto plazo en una mala inversión a largo".
Esperemos que la mayoría de lectores estén en el caso de inversiones a largo plazo, vía buenos fondos de inversión diversificados entre varios sectores y zonas geográficas, cuyas pérdidas de estos meses son muy inferiores a las acciones más "habituales" entre los particulares, aun así las pérdidas son significativas. Si bien, a largo plazo es recomendable invertir en bolsas diversificadas, hay que optimizar periódicamente la inversión y en caso de llegar un gran crash desinvertir. Así, la pregunta es: ¿ahora hay un gran crash? La situación macro y micro (resultados empresariales) no marcan esta línea, mientras no empiece a explotar de forma significativa la burbuja de deuda. De hecho, mientras los niveles de pánico están como pocas veces lo han estado, lo que suele preceder a subidas fuertes de bolsas, algunos grandes inversores se están posicionando.