Luis Miguel Díaz de la Fuente, delegado en Balears de Grupo Tecnitasa, considera que las Islas son un destino muy apreciado, especialmente por los extranjeros y asegura que «son un sitio único».
Díaz apunta a la falta de suelo como una de las causas que provoca una subida de precios. «Obviamente, el déficit de suelo provoca una subida de precios. Mallorca es una isla y tiene una serie de connotaciones territoriales que impiden que se desarrolle suelo como en otros lugares de España. Debería gestionarse el suelo de una forma más efectiva para facilitar la construcción de vivienda asequible. En todos los segmentos, la oferta es mucho menor que la demanda», asegura Díaz.
Considera que debe habilitarse nuevo suelo urbano, pero conjugándose con el escrupuloso respeto por el medio ambiente. «Todas las soluciones pueden contribuir a paliar el problema de la vivienda. La rehabilitación de viviendas antiguas, la reconversión de locales, el cambio de uso de viejos hoteles a residencial, aumentar alturas... Y también puede incorporarse suelo urbano, aunque priorizando siempre el respeto por el medio ambiente. Todas las medidas ayudan», indica.
Díaz no aventura descensos en el precio de la vivienda y explica que el mercado del lujo ha experimentado mayores subidas. «Hay una demanda muy elevada de viviendas de lujo de un público extranjero. A los tradicionales alemanes e ingleses hay que añadir ahora estadounidenses, mexicanos, venezolanos…», señala.
La falta de suelo es una de las grandes dificultades que deben solventar los promotores, también para la vivienda premium. «Se están demoliendo viviendas en zonas premium para construir una vivienda nueva, aprovechando el suelo ya existente», argumenta.
Balears está de moda y cada día son más los extranjeros que aspiran a comprar una vivienda en las Islas. «Balears es un paraíso, un sitio único. Lo tiene todo. Aquí hay seguridad, buena gente, un gran ambiente, el clima es maravilloso, la conectividad es excelente, una sanidad fiable… Y también es cierto que hay un riesgo. Hay que dejar a las generaciones futuras la posibilidad de vivir en las Islas», manifiesta.
Los tipos de interés tienen una clara tendencia a la baja en estos momentos y el precio del alquiler está disparado. «¿Alquilar o comprar? Depende de las circunstancias personales de cada uno. España es un país de propietarios, pero hay un buen número de posibles compradores que se han de dirigir al mercado de alquiler porque no pueden acceder al 20% o 30% que hay que aportar sin financiación para comprar un inmueble», asegura.
Díaz asegura que se está produciendo un repunte en las ventas y que espera que continúen al alza. «En febrero de 2024 hemos visto un repunte de las tasaciones hipotecarias. En el sector del lujo, las ventas han aumentado de forma importante en los últimos años, aunque es cierto que en el 2023 el ascenso se quedó en el 10%. Creemos que en el 2024 se incrementará hasta el 12%. Vienen los norteamericanos, que ha quedado claro que les gusta mucho el campo mallorquín. Son de alto poder adquisitivo. De hecho, en el sector de la vivienda premium, son muchos los clientes que compran sin hipoteca. En todo caso, en las viviendas con un precio inferior al millón o millón y medio de euros, el crecimiento esperamos que no sea tan alto», augura.
La sostenibilidad es un tema recurrente en los últimos años. Díaz tiene claro que construcción y sostenibilidad, no tan solo no son incompatibles, sino que deben ir de la mano. «Claro que se puede hablar de construcción sostenible. Requiere un alto grado de especialización, pero las viviendas sostenibles están en auge. Reducir las emisiones de CO2 de una vivienda es muy importante, la sociedad lo está pidiendo», asegura.
Explica, además, que a la hora de hacer un informe de tasación se tienen en consideración factores ligados a la sostenibilidad como la eficiencia energética. «En Tecnitasa tenemos muy en cuenta la sostenibilidad. Valoramos mucho una vivienda ecosostenible y, además, el mercado también lo hace. Es ya una demanda generalizada, que no ha dejado de aumentar en los últimos años. Además, del coste de construcción, que es entre un 10% y un 12% mayor que el de una vivienda tradicional, en las mismas condiciones de calidad, tiene un valor mucho mayor. A futuro, la vivienda ecosostenible tendrá mejores condiciones hipotecarias. Las entidades financieras primarán la sostenibilidad. Este tipo de productos cada vez abundarán más porque serán más demandados», apunta finalmente el delegado en Balears de Grupo Tecnitasa.