El titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Palma, José Castro, advirtió ayer martes de que la investigación en torno a los 250.000 euros que presuntamente entregó como soborno el productor televisivo José Luis Moreno al ex presidente del Govern balear Jaume Matas "no ha hecho más que empezar", al igual que otras supuestas irregularidades denunciadas sobre la adjudicación de programas y el encargo de decorados a empresas vinculadas al empresario.
Así lo expone el magistrado en el auto que dictó ayer para decretar prisión bajo fianza de tres millones de euros para Matas, y en el que observa indicios de que durante la gala de inauguración de la radiotelevisión autonómica IB3 celebrada el 4 de septiembre de 2005 en el Casino de Mallorca, el ex ministro recibió de Moreno un sobre con 250.000 euros en concepto de "soborno" por las adjudicaciones de programas y decorados por el órgano de contratación del ente público a mercantiles vinculadas al productor.
Un pago que, tal y como señala el juez en su resolución, a la que tuvo acceso Europa Press, y de acuerdo a lo postulado por la Fiscalía anticorrupción, guarda relación con el presunto fraude en los concursos y licitaciones de las empresas de Moreno con IB3, y que fue corroborado por la ex jefa de Producción del Ente autonómico, Nani Bohigas.
En su exposición de los antecedentes de hecho, Castro reconoció que salvo la manifestación del denunciante del presunto soborno de Moreno, Luis Velasco, "ningún dato objetivo existe sobre tal entrega, pero tan cierto como esto es también que las irregularidades denunciadas relativas a la adjudicación de programas tienen visos de ser ciertas", al aseverar que "han sido corroboradas por personas vinculadas a IB3 cuando supuestamente se produjeron".
Es por ello que, abogó, "habrá de estarse a lo que arroje esta investigación que, en tanto judicializada, no ha hecho más que empezar", incidió el magistrado.
En relación a Velasco, se trata de una de las personas que testificaron ante el Ministerio Público en el marco de estas diligencias que, bajo el nombre de Operación Cámara, fueron abiertas a finales de 2008 y constituyen ahora una pieza separada del caso Palma Arena. El pasado 5 de marzo fue citado a declarar ante el juez aunque "quizá por la premura de su citación y encontrarse en Sudamérica no pudo ratificar su denuncia", señala el juez en el auto.
En su declaración, el denunciante aseguró haber sido testigo del pago de un presunto soborno por parte de Moreno al ex jefe del ejecutivo balear durante la gala de IB3 como contraprestación por algún favor realizado, en lo que se convirtió en una de las principales líneas de investigación dentro de las diligencias informativas que la fiscalía remitió posteriormente al juzgado, para que éste prosiguiese con las pesquisas.
Por su parte, Moreno negó el pasado domingo haber entregado 250.000 euros al ex presidente y aseguró que su relación con el ex líder del PP es "inexistente". En declaraciones a la cadena SER y recogidas por Europa Press, el empresario consideró "absurdo" "darle crédito a un soborno de un presidente autonómico, para una televisión tan pequeña, y en una gala de presentación con miles de personas delante".