La Conselleria de Salud va a distribuir 184.800 vacunas de gripe estacional que han costado 1.071.888 euros durante la campaña de vacunación de este año, que durará del 15 de octubre al 30 de noviembre, y que tiene como objetivo cubrir al mayor número de personas pertenecientes a colectivos de riesgo para reducir así los casos.
En rueda de prensa, el conseller de Salud, Vicenç Thomàs, junto con la directora general de Salud Pública, Margalida Buades, y la responsable de la campaña de vacunación de la gripe común , Eugènia Carendell, ha señalado que este año "como novedad", "sólo habrá una vacuna que incluirá todos los virus de la gripe", incluyendo, así, la variante H1N1 de la gripe A, junto con las cepas habituales de la gripe A y B.
Respecto a las previsiones en cuanto a la gripe estacional, Carendell ha apuntado que este año se espera una epidemia "menos severa" que el anterior con "virus mixtos", según los datos de los que dispone en relación al comportamiento del virus en el hemisferio sur.
Durante esta campaña, se vacunarán gratuitamente a todas aquellas personas que se incluyen dentro de los grupos de riesgo habituales. Asimismo, este año se ha ampliado la "población diana" a nuevos grupos a los que se recomienda vacunar, debido a que el nuevo virus de la gripe A todavía circula.
Estos son los pacientes con obesidad mórbida, los enfermos afectados con algún tipo de deterioro cognitivo, todas las mujeres embarazadas, servicios esenciales para la comunidad (personal sanitario, personas de residencias, cuidadores de enfermos crónicos o personas que conviven con ellos, policía, bomberos y protección civil), y personas que viajen a países afectados por la gripe aviar.
Cabe recordar que los grupos de riesgo habituales son las personas mayores de 65 años, los residentes en instituciones geriátricas o clínicas, los adultos y niños con diabetes, enfermedades renales y enfermedades crónicas (relacionadas con el sistema pulmonar, cardiovascular, insuficiencias respiratorias y asma, entre otros), y las personas inmunodeprimidas.
En cuanto a los resultados de la anterior campaña de vacunación antigripal, la responsable de la misma ha destacado que tuvo unas "características especiales" al producirse en dos periodos, uno contra la gripe común y otro contra el nuevo virus de la gripe A. Así pues, en Baleares se vacunó de la gripe estacional a un total de 140.272 personas: 115.076 en Mallorca, 9.912 en Menorca y 15.284 en las Pitiusas. Concretamente, de la gripe A fueron sólo 40.890 personas (33.718 en Mallorca, 1.937 en Menorca y 5.235 en Ibiza y Formentera).
Retiradas las vacunas contra la gripe A
En este sentido, Thomàs ha informado de que el pasado mes de agosto se retiraron las cerca de 128.000 vacunas sobrantes contra la nueva cepa de gripe A distribuidas durante la anterior campaña y que se llevaron a la península para su posterior destrucción.
Con el fin de aumentar la cobertura de la vacunación entre la población, Salud ha puesto en marcha una campaña de información destinada a la captación de los grupos de riesgo. Así pues, han enviado casi 113.000 cartas y más de 55.000 mensajes SMS. Del mismo modo, han hecho llegar listas de personas de riesgo a todos los médicos y enfermeras de Atención Primaria, además de distribuir 1.100 carteles informativos en los centros de salud e insertar anuncios en prensa escrita y radio.
Desde Salud, han pedido a los ciudadanos que ante síntomas gripales, eviten desplazarse a los hospitales y que, en su lugar, acudan a los centros de Atención Primaria. Además, también ponen a disposición el teléfono 061 para ofrecer información sobre cómo suavizar la sintomatología.
Por otro lado, Salud ha vuelto a poner en marcha la "Red Centinela", integrada por 34 médicos que trabajan en centros de Atención Primaria y que cada semana informan a Salud Pública sobre los casos de gripe detectados, además de recoger muestras para su posterior análisis y así saber qué virus circulan. De esta forma, la Conselleria hace un seguimiento de la evolución de la gripe entre la población balear, con el fin de aplicar las medidas oportunas, si fuera necesario.
Cabe recordar que la gripe no se cura con antibióticos y que ante los síntomas es recomendable hacer reposo, beber mucho líquido (agua y zumos) y tomar antitérmicos. También se deben extremar las medidas higiénicas para evitar la transmisión del virus a otras personas.