El fracaso escolar ha aumentado en la comunidad balear un 7,5 por ciento entre los años 2002 y 2009, pasando de una tasa del 33,5 al 41por ciento, según ha informado el Instituto de Política Familiar (IPF) en un comunicado.Este "alto grado" de fracaso escolar se debe, según esta entidad, a la "siembra del desconcierto" entre las nuevas generaciones de padres y al sistema educativo actual sobre cómo deben actuar los niños en la escuela y en el hogar.
Así, el IPF considera que las familias se han ido "vaciando de contenidos", mientras que el profesorado se ha ido encargado progresivamente de la higiene y aseo de los niños, su salud, alimentación, conocimiento del entorno inmediato y educación vial.
Además, cree que hay un "superproteccionismo" de los menores y que ya no se abordan aspectos como el sacrificio o la autoestima, y que impera la "falta de exigencia" en la que se intenta proporcionar a los niños de una "felicidad utópica" concibiendo su vida como si fuera un "continuo cuento de hadas".
Por ello, IPF reclama el regreso de la "pedagogía del contenido" puesto que entiende que ésta eliminaría las "actuales injusticias" que se cometen con los alumnos que estudian y se esfuerzan, y se dejaría de identificar el afán de superación con la competitividad salvaje.