Científicos de Balears, Croacia y Alemania han descubierto una nueva especie de pez que habita en los fondos de algas rojas en aguas del archipiélago balear, ha indicado este miércoles el Instituto Español de Oceanografía (IEO)
Este pez es una nueva especie íctica, que ha sido bautizada como Speleogobius llorisi, en honor al ictiólogo Domingo Lloris.
Se trata de un góbido perteneciente al género Speleogobius, del cual solo se han descrito dos especies hasta ahora, ambas en el Mediterráneo, ha precisado el Instituto Español de Oceanografía.
Los ejemplares de estas especie son de pequeño tamaño -apenas llega a los tres centímetros de longitud total en los individuos capturados hasta ahora- y de un color rojizo, lo que hace que la especie se mimetice bien con los fondos de algas rojas.
El descubrimiento de esta nueva especie es el resultado de un trabajo de investigación en el que han participado científicos del Centro Oceanográfico de Baleares del IEO, del Museo de Historia Natural de Rijeka, en Croacia, y del departamento de Ictiología del Bavarian State Collection of Zoology de Múnich, en Alemania.
En IEO ha explicado que todos los ejemplares de la nueva especie utilizados para su descripción se obtuvieron mediante muestreos con patín epibentónico en la costa suroeste de Mallorca, durante la campaña oceanográfica DRAGONSAL de 2014 y otros muestreos realizados en 2015, que tenían como objetivo el estudio de los fondos circalitorales blandos de la plataforma continental de la isla, entre 40 y 100 metros de profundidad.
A pesar de que esta especie no ha sido conocida hasta ahora, los científicos creen que su presencia es frecuente y relativamente abundante en las Islas Baleares, especialmente en los fondos de Peyssonnelia y maërl.
La descripción de esta nueva especie de pez es calificada de importante para mejorar el conocimiento de la biodiversidad marina del Mediterráneo occidental y, en particular, de los fondos de algas rojas, considerados hábitats esenciales para el mantenimiento de las poblaciones de peces, y en el caso del maërl hábitats sensibles, protegidos por leyes internacionales medioambientales y pesqueras.