Fuentes del hospital de Son Espases han confirmado este jueves que el niño de 18 meses, ingresado el pasado martes tras asfixiarse con una cuerda en una escoleta de Cala d'Or, se encuentra en la UCI pediátrica con pronóstico reservado.
El niño estaba jugando el pasado martes con un grupo de diez compañeros cuando la cuerda de un balancín se le enrolló en el cuello, según información de la Guardia Civil. Cuando la cuidadora se percató el niño ya estaba inconsciente, por lo que llamó inmediatamente al 112.
Los sanitarios consiguieron estabilizar al niño, que llegó consciente y estable a Son Espases. Tras su ingreso, su estado empeoró y ahora se encuentra sedado y con respiración asistida.