El candidato a las primarias socialistas Pedro Sánchez ha subrayado este viernes en Palma que si el PSOE quiere ser un «partido ganador tiene que volver a recuperar la credibilidad» y «hacer lo que dice», a lo que ha añadido: «Y yo cumplí con la palabra dada y pagué un alto precio por ello».
Sánchez ha pedido a afiliados que el próximo 21 de mayo, día de celebración de las primarias socialistas para escoger al nuevo líder, sea «la última vez que un secretario general tenga que dimitir por cumplir con la palabra dada a sus votantes y a sus militantes».
Sánchez ha rechazado el «discurso del miedo» en el proceso de renovación que está viviendo su partido y ha reivindicado: «Tenemos que ser valientes y volver a situar al PSOE donde le corresponde, en la izquierda».
El político socialista ha tenido palabras para los «compañeros» que advierten de que con Sánchez «se va a romper el partido» o que dicen que «que este hombre quiere romper España».
«El copyright del discurso del miedo lo tiene la derecha», ha respondido Sánchez, que ha defendido que la socialdemocracia es «ilusión», se sitúa a «izquierda» y lleva a cabo políticas progresistas muy distintas a las de la derecha.
Sánchez se ha referido a la necesidad de que el PSOE «vuelva a ser un partido de izquierdas», con políticas económicas y sociales de izquierda como la apertura del debate sobre la eutanasia.
Las primarias volverán a situar al PSOE en la izquierda, se ha mostrado convencido Sánchez, que ha considerado necesario «refundar» su partido. De no ser así, la derecha continuará gobernando España durante muchos años, ha señalado.
Sánchez ha dado la bienvenida al proceso de primaras a «cuantos más compañeros mejor», pero ha hecho hincapié en que en este momento solo hay dos opciones «claramente», en referencia a su proyecto y al de Susana Díaz.
«Estamos hablando claramente -ha dicho- del modelo que se impuso por las bravas el pasado 1 de octubre, el de la abstención al PP y el del PSOE del siglo XX que no ha entendido los cambios políticos de los tres últimos años en el sistema político español».
Frente a esta propuesta se encuentra un PSOE alternativo al PP, el de la «palabra dada y el de un partido del siglo XXI».
Tras visitar ayer a los compañeros socialistas de Ibiza, Sánchez se ha desplazado hoy a la capital balear para proseguir con su campaña de cara a las primarias socialistas.
El político socialista ha sido recibido esta tarde con entusiasmo por el medio millar de afiliados y simpatizantes que han abarrotado el salón de actos de la ONCE de Palma.
Sánchez ha escuchado durante varios minutos aplausos de bienvenida y los gritos continuados de apoyo «Pedro Pedro», mientras que sonaba por los altavoces el «Color esperanza» de Diego Torres.
Al acto político han asistido la presidenta de Baleares y secretaria general de los socialistas de las islas, Francina Armengol, y algunos miembros de su ejecutivo, como los consellers de Hacienda, Catalina Cladera, y Trabajo, Iago Negueruela.
Sánchez ha sido presentado por el exconseller de Economía Carles Manera y la alcaldesa socialista de Son Servera, Natalia Troya.
Aunque Francina Armengol es partidaria de Patxi López, Sánchez ha pedido al auditorio un aplauso para ella, en un acto que ha concluido con el canto de la Internacional Socialista.