Redacción Menorca | Palma |
Los desmadres de muchos de los turistas que visitan Mallorca, sobre todo en las zonas de marcha, no deja de sorprendernos. Ni vergüenza ni pudor, así se podría describir la actitud del protangonista del vídeo.
Ataviado al más puro estilo Borat, aunque con unos quilos de más, este turista se paseaba así preparado para una noche de fiesta.
... pues yo he visto cosas peores en una procesión... tíos semidesnudos, con las lorzas expuestas, flagelándose en público, sangrando, salpicando a los espectadores circundantes, sudando y con caras torturadas... y no recuerdo tanta protesta...
Als mallorquins realment no els importa res què aquesta gentussa faci a ca seva,tots els plors i arrabassades de cabells no són més què la seva comèdia secul.lar.Dobbés i res més els interessa a qualsevol preu.
Señores. Señoras... El problema no es de los turistas. El asunto es si nososotros hicieramos eso Londres. Liverpool. Manchester. Hannover, Munchen... Reflexionemos estas conductas se producen por la permisividad que tenemos. Saben que nos harian en Nairobi??
Toda España en su conjunto y algunas regiones y zonas muy en particular, se han convertido en un grandioso estercolero humano, donde además de hordas de delincuentes de todas las partes del mundo, nos llegan inmensas manadas de seres infra-humanos, sin ninguna educación ni civismo alguno, que sólo se rigen por instintos primarios y que vienen aquí a comportarse de una forma que nunca se atreverían a hacer en sus países de origen. Uno de los más recientes episodios lo hemos visto hace sólo un par de días en Benidorm, donde tuvo que actuar la policía antidisturbios contra una manada salvaje de ingleses borrachos y descontrolados, simplemente porque su equipo había pasado a semifinales del Mundial de fútbol. Imaginaos lo que puede pasar cuando pierdan...
Be lis está as mallorquinots!
Aunque costara dinero, sería muy bueno publicar fotos de su hazaña en su lugar de origen. Por lo menos pasaría -es de suponer- cierta vergüenza.
Es solo terapia para sobreponerse al síndrome del miembro minúsculo. No te rías por favor que es muy serio.