La ratio de ventas de coches usados en Balears frente a la de nuevos es de 1,4 a 1, según datos de los seis primeros meses del año de la consultora MSI recogidos para la patronal de los concesionarios, Faconauto.
En lo que va de año se han transferido 28.336 vehículos de ocasión en Baleares, lo que supone un crecimiento del 1,7 % respecto al mismo periodo del año pasado. En el conjunto del país, las ventas de coches usados crecieron un 6 %, hasta las 990.899 unidades.
Con la referida ratio, la media balear está por encima de la nacional, que fue de 1,3 a 1, lo que sitúa a España muy por debajo de la media que hay en otros grandes mercados europeos, que como mínimo nos doblan en esta estadística.
Según la patronal, hasta que no salgan del circuito de vehículos usados los coches de más de diez años España no se equiparará con los principales países europeos, donde el consumidor cambia mucho antes de coche, lo que da como resultado un mercado más dinámico, «sano y menos antiguo».
Justamente, este comportamiento alcista del mercado durante estos seis primeros meses del año se debe, según Faconauto, al buen momento que atraviesan las transferencias de modelos de hasta cinco años, con un aumento del 15 % de los coches de hasta 3 años de antigüedad y un 18 % de los de 3-5 años.
Los usados de esta franja de edad siguen tirando del mercado y ya suponen más del 25 % de todas las transferencias. Además, se están viendo favorecidos por la llegada al mercado de unidades automatriculadas por parte de los concesionarios.
Por su parte, las ventas de los vehículos de ocasión de 6 a 10 años han descendido sus ventas en la primer mitad del año un 13,9 % y los de más de 10 ha experimentado un crecimiento del 7,7 %.
Los concesionarios vuelven a ser los protagonistas de este mercado convirtiéndose en el canal que crece con más fuerza, al incrementarse sus ventas un 20 %, muy por encima del resto de canales de comercialización.
Raúl Morales, director de comunicación de Faconauto, ha declarado que «el mercado de ocasión en nuestro país refleja que los protagonistas son los vehículos de menos de cinco años, tendencia que debería prevalecer frente a los usados antiguos, como en otros países de nuestro entorno».