El más que probable adelanto de las elecciones generales ha hecho que el Govern intensifique estos días la presión sobre Pedro Sánchez para que apruebe el Régimen Especial de Balears (REB) antes de la convocatoria electoral. Fuentes del Govern aseguran que se está trabajando en esta línea desde hace días porque el texto definitivo ya está «cerrado y pactado» y, por lo tanto, ya solo falta el visto bueno por parte del Consejo de Ministros.
Y es aquí donde está el problema porque, si las elecciones se adelantan y se celebran el 28 de abril ?la fecha más probable?, solo quedan tres reuniones ordinarias del Consejo de Ministros para poder aprobar el texto. Si las elecciones se celebran en ese día, el decreto de convocatoria se tiene que firmar el 4 de marzo y en ese mismo momento el Gobierno queda en funciones, lo que deja fuera cualquier posibilidad de aprobación del documento definitivo.
Pero hay otra dificultad añadida para la aprobación del texto porque el fin de legislatura supone la disolución del Congreso de los Diputados. Si el Consejo de Ministros aprueba un proyecto de ley y lo envía al Congreso, en el momento en que se disuelven las Cámaras, es decir, ese 4 de marzo, caducan todos los asuntos pendientes de examen y resolución que no se hayan aprobado.