La vacunación de los niños baleares durante el confinamiento ha caído en picado por temor al contagio. Por ese motivo, la Conselleria de Salut está avisando a los padres que no pasaron por los centros médicos desde marzo para que se pongan al día con el calendario antes de que se inicie la escolarización en septiembre.
Según la Direcció General de Salut Pública, de enero a mayo, ha caído hasta un 12 por ciento la vacunación de bebés de 2 a 4 meses de la hexavalente (que incluye difteria, tétanos, tos ferina, polio inactivada, hepatitis B e Hib conjugada). El 14 por ciento de los niños de 11 meses que debía acudir al centro médico entre marzo y junio no se aplicó la hexavalente y pneumococo. También se dejó de aplicar el 16 por ciento de la triple vírica de los 12 meses, el 15 por ciento de varicela de los 15 meses, el 37% de meningococo C de los 12 meses, el 27 por ciento de la varicela en los 3 años y el 35 de la triple vírica de la misma edad.
Según la Direcció General de Salut Pública, «nos ha preocupado durante toda la crisis del coronavirus poder mantener las tasas de vacunación de la población infantil, que no ha tenido que ver con la labor asistencial», sino al temor a visitar los centros médicos.
Marga Cañellas, coordinadora de Pediatría del IB Salut, señala que «se están llevando a cabo campañas urgentes de vacunación desde la Atención Primaria para captar a esos niños hasta 14 años que no se vacunaron durante el confinamiento». Y Cañellas insiste en que «en ningún momento se les ha dejado de vacunar, especialmente hasta los 15 meses. Se ha hablado con los padres para que no lo dejaran. Aún así, hay muchos que han preferido no moverse por miedo a ir a los centros médicos».
Contagios
Cañellas afirma que se está elaborando «un listado en Atención Primaria para captar a estos niños del tramo de 0 a 7 años y de 7 a 14. Hacemos especial hincapié en los menores de un año».
Por su parte, Edelmiro Vergés, pediatra de Atención Primaria y vocal del comité asesor de vacunas de la Asociación Española de Pediatría (AEP), descartó un posible «rebrote de difteria-haemophilus» por el descenso de vacunación, que ya se está solventando, pero «en el caso del sarampión o la meningitis, altamente contagiosos, podrían reemerger en cuanto empiece a llegar gente de fuera» a las Islas.