La presidenta del Govern y el líder de la oposición han confrontado este martes en el Parlament sus modelos políticos: Francina Armengol ha defendido aumentar los ingresos de la administración para mejorar los servicios públicos y Biel Company ha abogado por rebajar la presión fiscal y recortar gasto superfluo.
En su habitual debate en el turno de preguntas al Govern del pleno semanal de la cámara legislativa, el presidente del PP ha pedido a Armengol que compense con una bajada de los impuestos autonómicos el «hachazo fiscal» que prepara el Gobierno central.
A juicio de Company, la posible subida de impuestos al gasóleo de calefacción, la electricidad y las bebidas azucaradas, las tasas por circular por las autovías y a los billetes de avión «harán mucho daño a las rentas bajas».
Para el líder del PP, Armengol ha desaprovechado haber sido la presidenta que ha gestionado más recursos de la historia de la autonomía. «Ha tirado con pólvora de rey», ha asegurado.
Armengol le ha reprochado que «cada semana» lleve al Parlament propuestas que suponen aumentar los gastos y ahora reclame una rebaja de impuestos que reduciría los recursos públicos.
«No hemos subido ningún impuesto a las clases medias», ha resaltado la jefa del ejecutivo, que ha incidido también en las medidas de apoyo a los más afectados por la crisis de la covid-19 desarrolladas en el último año.
«Nuestra política es aumentar los ingresos, necesarios para mantener el estado del bienestar» y hacerlo con un modelo fiscal en el «que pague más quien más tiene, siempre de forma progresiva», ha abundado.
Armengol ha asegurado que su Govern es el que ha hecho más colegios, más plazas residenciales y de día, el que más ha mejorado el transporte público e invertido en vivienda, en salud y en educación.