Una encuesta del sindicato Asociación Nacional de Profesionales de la Enseñanza (ANPE Illes Balears) refleja que el 93 % de las aulas no dispone de sistemas de purificación de aire y, en relación directa, que el 78 % de los alumnos pasa frío a pesar de disponer de calefacción. No disponer de purificadores de aire obliga a mantener las ventanas abiertas para la ventilación y, por tanto, los alumnos pasan frío. El número de participantes en la encuesta ha sido de unos 700 docentes de Balears. ANPE advierte de una «considerable» ausencia de alumnos, que los estudiantes pasan frío debido a la ventilación con ventanas abiertas de manera permanente y que las bajas entre el alumnado y el profesorado han aumentado notablemente en los últimos días.
Contra un claro déficit de purificadores, ya apuntado hace unos días por el presidente de los directores de Secundaria, Joan Ramon Xamena, el 87 % de aulas tiene medidores de CO2. La encuesta de ANPE detecta una amplia disponibilidad de mascarillas FFP2 y de gel hidroalcohólico, con el 81 y el 82 %, respectivamente. Sin embargo, la disponibilidad de termómetros se queda en el 18 %, «cuando es una recomendación de la Conselleria d'Educació».
En referencia a los contagios entre el alumnado, la encuesta señala que el coronavirus está presente en prácticamente todos los colegios e institutos. El 85 % de las aulas presenta alumnos contagiados y casi la mitad de ellas no ha llevado a cabo un confinamiento. El 35 % de centros presenta entre 2 y 5 aulas confinadas. En cuanto al contagio entre el profesorado, el 75 % de los centros tiene profesionales afectados y lo más frecuente es encontrar entre 3 y 5 docentes positivos. El 11 % de centros tiene más de 10 docentes positivos.
Según el sindicato, «las faltas de asistencia en esta sexta ola han sido notables, ya que el 97 % de las aulas ha registrado ausencias, con una media que oscila entre 3 y 5 niños por clase. El 13 % de las aulas presenta más de 10 ausencias». ANPE recomienda poner las calefacciones a primera hora de la mañana para evitar que los alumnos pasen frío durante la jornada y que éstos usen ropa térmica, especialmente los más pequeños.