El psiquiatra y presidente del Colegio de Médicos de Baleares, Carles Recasens, teme que la eliminación del requisito del catalán para ejercer la medicina en la sanidad pública se convierta en una «cortina de humo» y que no se aborde de forma seria la planificación sanitaria que garantice que a corto, medio y largo plazo «haya profesionales suficientes de la sanidad». Así lo ha explicado en el programa ‘Los lunes pasamos consulta' de la cadena Ser.
«La eliminación del catalán como requisito para los profesionales sanitarios que quieran trabajar en la sanidad pública es un tema que nos esperábamos desde el momento que actualmente gobierna y tiene la cartera de Sanidad un partido que lo llevaba en su programa político. Sabíamos que sería un tema que la gente comentaría porque siempre el tema de la lengua y el idioma en Baleares y también en Cataluña es como abrir una caja de pandora y genera mucha polémica», dice el presidente del Colegio de Médicos.
Explica que ha trasladado su punto de vista y el del Colegio a la consellera de Salut, Manuela García Romero: «En el colectivo médico, en la relación médico paciente la lengua no es un problema. En las consultas se habla de lo que le pasa a la gente, de lo que padece. Ojalá podamos tener todos los especialistas. Nos preocupa que la lengua se convierta en una cortina de humo. Queremos que todas las consultas de los centros de salud y de los hospitales tengan los médicos que necesitan».
Recasens recuerda que el hecho de «que los profesionales vengan aquí, es un tema de mercado que regula hasta donde podemos exigir. En un momento en el que hay una falta de profesionales es bueno tener un discurso realista. Que la población sepa qué quiere decir que faltan médicos. Que faltan médicos es un mantra que se repite como si no tuviera consecuencias en la población pero sí las tiene». «Si falta un anestesista en un quirófano quiere decir que ese día no se opera, que falte un oncólogo quiere decir que la consulta no se pasa... Cuando desde el colegio denunciamos que hay falta de médicos las consecuencias van directamente a la población», dice el psiquiatra.
En su caso explica que «hablo catalán y estimo mi lengua y cultura, estoy casado con una mallorquina y llevo 20 años trabajando aquí. Utilizo el catalán y me adapto al máximo al paciente y es lo que creo que hacen todos los médicos que trabajan aquí. Algunos necesitarán más o menos tiempo para hacer esa adaptación y lo que tiene que hacer la administración es dar todas las facilidades para que se adapten a una tierra que les acoge», reflexiona.
No obstante recuerda que «Baleares no es la única región de España ni de Europa en la que faltan médicos. Todas las regiones tienen el mismo problema, va mucho más allá de un tema lingüístico va de una planificación suficiente a 10,15 o 20 años que es lo que hay que comenzar a hacer. No poner parches para vivir tres o cuatro años».
«Intentan poner soluciones mágicas que no son mágicas. El tema de quitar este requisito del catalán no solucionará el problema. Esperan que pueda ser más atractivo venir. El titular del día es que se elimina el requisito del catalán en la sanidad cuando realmente el titular que debería ser que el Govern hará lo que esté en sus manos para atraer y fidelizar a los profesionales», concluye.