El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha negado que Vox Baleares no siga las directrices de la dirección nacional del partido, si bien ha admitido que en un «Estado descentralizado» como España es «difícil» crear una fuerza política nacional que no tenga «diferencias entre un lugar y otro» del país. Por otra parte, Abascal ha señalado que el PP balear tiene «una responsabilidad» y es la de «cumplir con los acuerdos» y hacer realidad que las cosas cambien y en Baleares «vuelva a haber libertad lingüística de manera urgente». «Si no llegan al acuerdo con nosotros van a tener que prorrogar la política lingüística de una tal Armengol», ha advertido el dirigente de Vox.
Así lo ha sostenido Santiago Abascal en un acto en Madrid, donde el presidente de Vox ha señalado que a su partido le sucede «probablemente» lo que le pasa al PP «en todos los sitios». «Es muy difícil crear un partido nacional, como el de Vox, con la estructura del Estado existente. Porque la lógica del poder político descentralizado lleva a que sea muy difícil, por la naturaleza humana, a crear una fuerza política nacional que no tiene diferencias entre un lugar y otro», ha explicado durante su intervención. Abascal ha puesto como ejemplo que el PP en Murcia «dice una cosa del trasvase» y «en otros lugares dicen otra».
Por el contrario, «Vox dice lo mismo en Aragón que en Murcia», pero a veces, incluso a su formación, «le puede pasar cosas de esas». El presidente de Vox ha enmarcado las discrepancias con la delegación balear de su partido en que «unos quieren ir más rápido y negociar con más fuerza, nada más grave que eso». Por ello, se ha mostrando «muy tranquilo» y «convencido» de que los diputados de Vox en Baleares «van a cumplir con su responsabilidad» y de que habrá acuerdo.
Las declaraciones de Abascal tienen lugar después de que Vox Baleares condicionara su apoyo al techo de gasto de 2024 a cerrar con el PP una calendarización para implantar la libre elección de lengua en la enseñanza de las Islas. La dirección central ha defendido su «firme determinación» a «cumplir» el pacto con el PP para «cambiar el rumbo» de Baleares, incidiendo en la necesidad de votar a favor del techo de gasto.