Los dos grandes partidos de Baleares llegan este domingo a las urnas con el objetivo de ser la lista más votada y de consolidar o recuperar el liderazgo. El PP parte con ventaja ya que ha sido el partido más votado en las dos últimas elecciones que se han celebrado: las autonómicas de mayo del año pasado y las generales que convocó Pedro Sánchez de manera inesperada en julio de ese año.
No se espera una gran participación, algo que siempre pasa cuando las elecciones europeas no coinciden con las autonómicas y municipales. La de hace cinco años sí lo hicieron por lo que la abstención fue menor. Votó el 53 % del censo frente al 36,4 % de un año antes, cuando se celebraron elecciones exclusivamente europeas, como sucede este lunes.
El examen
La abstención será clave, pero las elecciones puede ser un termómetro para medir el grado de aceptación de las políticas de Marga Prohens, que ya lleva casi un año en el Govern. El resultado de este domingo también puede indicar el estado de ánimo de los socialistas tras haber perdido las principales instituciones de las Islas y también indicará si la aprobación de la amnistía o la investigación abierta a Begoña Gómez, la mujer de Pedro Sánchez, termina pasando factura y los socialistas suben o bajan con respecto a los comicios de hace dos años.
PP y PSOE son las dos únicas candidaturas que tienen opciones de conseguir un escaño balear en el Parlamento Europeo. El de Rosa Estaràs (PP) está garantizado mientras que el de Alícia Homs es más dudoso ya que está en el puesto 21 de la lista, la frontera de los escaños que le otorga el CIS. En cualquier caso, Balears perderá presencia en la Eurocámara ya que uno de sus diputados, José Ramón Bauzá, se ha caído de todas las listas tras ir en la de Ciudadanos.
Los demás
El resto de partidos es consciente de que estas elecciones son meros socios de otras candidaturas. En el caso de Més, que concurre con ERC y Bildu, su objetivo es mejorar los 20.530 votos que obtuvo hace cinco años en alianza con Compromís. El PI se ha mantenido fiel al PNV, un socio político con el que concurre desde que existía UM.
Por lo que respecta a la izquierda del PSIB, tanto Podemos como Sumar llegan a las elecciones de con unas expectativas inciertas. Podemos tiene cierta implantación en las Islas, algo que aún le falta a Sumar. Si las elecciones de hoy sirven para examinar a Prohens y ver el estado de ánimo de los socialistas, también serán una herramienta interesante para testear cuál de las dos formaciones gana la batalla por situarse como alternativa de izquierdas al PSIB.