La segunda jornada del VII Congreso de El Pi–Proposta per les Illes Balears se celebró ayer en Alcúdia un encuentro clave para la formación, donde se definió su nueva dirección. Joan Miralles fue proclamado nuevo coordinador general del partido con un apoyo del 96% de los votos, cumpliendo así con los estatutos que exigen votación incluso cuando hay una única candidatura. Por su parte, Tolo Gili fue reelegido presidente del partido por tercera vez consecutiva, consolidando su liderazgo.
Durante su discurso, Joan Miralles lanzó críticas contundentes hacia la situación actual de Baleares: «Hemos dado pasos atrás. Lideramos indicadores que dan vergüenza, como el fracaso escolar o los casos de violencia de género». Recalcó que para cambiar esta realidad, El Pi debe participar en el gobierno autonómico y tener «las llaves de la caja», en referencia a lograr un Régimen Fiscal Especial que responda a las necesidades de la insularidad: «Un REB digno no es pedir limosna, es reconocer la idiosincrasia especial de las islas».
También abordó problemas como el acceso a la vivienda, rechazando medidas que penalicen a pequeños propietarios, y criticó el modelo turístico, calificándolo de «desbocado e insostenible». En este sentido, instó a los mallorquines a no vender sus viviendas para conservar el control del territorio: «No podemos basarnos en construir segundas residencias para extranjeros. Debemos mantener las riendas de nuestra tierra».
Miralles insistió en la necesidad de fortalecer el partido mediante alianzas con formaciones municipales independientes, como Seny i Sentit (Sóller), Convergència (Santa Margalida) y Futur Llubí, con las que ya han iniciado contactos. Representantes del Partido Nacionalista Vasco y Junts per Catalunya también estuvieron presentes en el congreso, así como miembros del PP y PSOE. Sin embargo, la ausencia de MÉS, que sí estaba invitado, y la exclusión de Vox marcaron la jornada. Tolo Gili justificó la decisión de no invitar a los miembros del partido de extrema derecha: «Huimos de los extremos». El evento concluyó con un llamado a la unidad y al trabajo conjunto. «No hay fórmulas mágicas para crecer, pero sin vosotros no somos nada», expresó Miralles, subrayando la necesidad de remar en una misma dirección para consolidar el proyecto político de El Pi y su papel en el panorama balear.