Las vacaciones del verano 2025 son las más caras de la historia: los precios han subido y el 26 % de los baleares no puede pagarlas. Este es el resumen que se extrae de los datos aportados por la asociación de agencias de viajes Aviba y por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE). El presidente de Aviba, Pedro Fiol, precisa que las vacaciones se han encarecido un 30 % comparado con el ejercicio 2019. En este sentido, explica que no se puede tomar como referencia la pandemia de la COVID-19, puesto que aquí se abarataron por las restricciones de movilidad, por lo que el 40 % de bajada detectado «no es real».
Fiol subraya que «lo habitual es que el precio de los viajes siempre suba», pero admite que tras la crisis sanitaria se disparó debido a las ganas de viajar y disfrutar de los ciudadanos. Por tanto, el acumulado es más elevado de lo que habría sido de no haberse producido dicha circunstancia excepcional. Además, resalta que hay que tener en cuenta la crisis inflacionista.
Vacaciones más cortas
El presidente de Aviba apunta que no sólo se han encarecido las vacaciones como tal (vuelos y hotel), sino que también lo ha hecho la oferta complementaria: restauración, excursiones, coches de alquiler, etc. Por ello, los viajeros se han visto obligados a recortar sus días de vacaciones.
Los ciudadanos de las Islas suelen elegir para vacacionar el norte de España o ciudades europeas. «No suelen pedirnos una semana en Matalascañas; sí un par de noches en Formentera», comenta. Sin embargo, han pasado de estar una semana a cuatro noches; al igual que en las ciudades europeas. Respecto al gasto medio, suele ser de unos 650 euros por persona el vuelo y el alojamiento; en el caso de la menor de las Pitiusas dos noches cuestan unos 350 euros. Otro aspecto relevante es que los baleares se fijan más en el precio a la hora de escoger su destino que en el hecho de que no esté masificado.
Caída de ventas
El encarecimiento, en general de los precios, ha motivado una caída de ventas. Como se ha indicado anerteriormente, el INE ha publicado que un 26 % de los residentes en el Archipiélago balear no pudo ir ni una semana de vacaciones en 2024. Fiol apunta que este año las ventas han caído un 4 % - 6 %. «Veníamos de un 2024 con un aumento de hasta el 15 % en volumen de ventas sabíamos que tarde o temprano no podríamos seguir reputando con estos crecimientos», señala.
En este sentido, argumenta que muchos residentes en las Islas no pueden viajar en verano, ya que trabajan en el sector turístico y cuando intuyen que la temporada no será tan buen como la anterior aplazan la compra de sus vacaciones. «Cuando se habla de una temporada turistica de récord muchos baleares compran sus viajes antes de la época estival. Sin embargo, cuando hay dudas, esperan al último momento», señala.
No es obligatorio dejar que te tomen el pelo en vacaciones.