En plena época veraniega, una peligrosa moda viral se ha ido extendiendo por redes. Esta tendencia consiste en exponerse al sol sin ningún tipo de protección solar y ha ido 'enganchando' a seguidores en las diferentes plataformas, especialmente entre los jóvenes, que buscan un bronceado rápido y duradero, ignorando los riesgos que esto puede acarrear para la salud.
Esta moda, bautizada con el nombre de callo o dureza solar, señala que la piel puede adaptarse progresivamente al sol sin necesidad de crema, generando una supuesta «resistencia natural». Sin embargo, esta afirmación carece de base científica y ha sido ampliamente desmentida por varios profesionales sanitarios al ver los testimonios de los usuarios que han promovido esta tendencia.
Algunos internautas comparten orgullosos en redes su tono de piel después de varios días sin protección, lo que ha encendido las alarmas entre los expertos, ocasionando que se emitan mensajes advirtiendo de los peligros de esta tendencia.
El verano pasado, el futbolista Marcos Llorente fue muy criticado en redes por tomar el sol sin crema solar. El futbolista, subió una imagen en redes junto a un texto que generó mucho debate. «Si crees que el cáncer de piel aparece por culpa del sol, eres el rey de los ignorantes», explicó a un usuario que contestó a su post. El jugador se vio obligado, ante la avalancha de críticas, a rectificar sus comentarios sobre este tema. «Siempre he sido una persona muy respetuosa y en este caso he dado mi opinión al respecto del sol ya que soy libre de ello. No soy ningún negacionista del melanoma», indicó Llorente en su cuenta de X.
Alarma entre los dermatólogos
Los dermatólogos están alarmados por el aumento de casos de cáncer de piel, ya que en sólo cuatro años se han incrementado un 40 %. El doctor Marc Mir, dermatólogo del servicio de dermatología de Son Espases, advierte que las recomendaciones de algunos influencers y negacionistas en las redes sociales están motivando un aumento de melanomas y de pacientes que acuden a urgencias con quemaduras importantes.
La exposición continuada al sol sin protección favorece el envejecimiento prematuro de la piel, la aparición de manchas, arrugas y, lo más grave, aumenta el riesgo de cáncer cutáneo. Usar protección solar de amplio espectro, evitar el sol en las horas centrales del día y reaplicar cada dos horas sigue siendo la única forma segura de disfrutar del verano sin poner en peligro la salud.
El bronceado aparece como un mecanismo de defensa de la piel ante la exposición a la radiación ultravioleta (UV) del sol o de fuentes artificiales, haciendo que las células de la piel, llamadas melanocitos, produzcan melanina, un pigmento marrón que oscurece la piel para protegerla del daño, este proceso cuantas más veces se realiza durante años y años, provoca que los melanocitos agoten su capacidad de defensa y entonces empiezan a mutar y pueden degenerar a células cancerígenas, melanoma, metástasis, y muerte. Hay que ser bastante “”meloncio”” para entrar en esta dinámica tan destructora, pero todo sea por la moda.