La presidenta del Govern, Marga Prohens, ha mostrado por carta al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, su malestar y sorpresa por los planes para instalar un gran almacén para bombas y misiles en la base aérea de Son Sant Joan. En la misiva, Prohens muestra su queja y «sorpresa» por haberse enterado del proyecto a través de los medios de comunicación y de los planes del Gobierno de España y del Ministerio de Defensa «de la construcción de un almacén de bombas, explosivos y armamento nuclear del Ejército del Aire». Con la petición de información a Sánchez, Prohens se suma a las quejas por el proyecto que ya expresó el portavoz del Govern y otras fuerzas políticas como Més per Mallorca que plantea llevar el asunto al Senado.
En la carta, la presidenta muestra su «absoluta comprensión a las necesidades del Ejército del Arie y de nuestro país en cuestiones de Defensa, especialmente en el actual contexto que exige garantizar la seguridad de nuestros ciudadanos ante amenazas externas». Sin embargo, lamenta «que se haya procedido a la proyección de esta instalación, cuya necesidad y oportunidad no pretendo cuestionar, sin contactar ni informar previamente ni a mi Govern, ni al Consell de Mallorca ni al Ajuntament de Palma».
En la misma línea, valora Prohens que se trata de una «instalación crítica y sensible» y «sin lugar a duda, una cuestión de Estado». Insiste en que ante tal situación «debería haberse informado de primera mano a nuestras administraciones para tener conocimiento de sus implicaciones, especialmente por lo que respecta a las garantías de seguridad y las actuaciones previstas en situaciones de emergencia y no tener conocimiento de ello por los medios de comunicación».
Prohens cierra la carta: «Confío en que podamos recibir a la mayor brevedad información de primera mano sobre esta instalación militar por parte del Gobierno y, concretamente, del Ministerio de Defensa».
En total, este departamento invertirá 1,8 millones de euros en la construcción de la instalación. Según los datos de la adjudicación, se prevé que tenga una capacidad de almacenamiento de 75.000 kilogramos y estará construido con una forma de iglú que quedará semi enterrado.
El complejo estará cubierto de una capa de hormigón de 40 centímetros, tierra y vegetación para limitar su impacto en el entorno. Entre el armamento que almacenará, según el Ministerio de Defensa, habrá misiles y bombas AMRAAM, Meteor, IRIS-T, GBU-49 o Hellfire, utilizadas de forma habitual por el Ejército del Aire y el Espacio en sus aeronaves. Las dos últimas son las que se pretenden utilizar para los drones MQ-9 Predator.
La base aérea de Son Sant Joan es la sede del Ala 49 en la que también se encuadra el 801 Escuadrón. Ahora mismo es la unidad de referencia en labores de búsqueda y rescate, además de vigilancia marítima, por lo que sus aeronaves no emplean, en principio, el armamento que se pretende almacenar ahora por parte del Ejército. También acoge al Centro Coordinador de Salvamento Aéreo de Baleares (RCC Palma), responsable de todas las operaciones SAR en la región de vuelo de Barcelona. Ahora mismo, el Ala 49 opera el avión CN-235 (D.4) y el helicóptero Sikorsky S.76 HD.24, ambos modificados para llevar a cabo misiones de búsqueda y rescate.
Uy, perdón, se me paso