Es el momento de disfrutar, de despojarse de toda presión y de saltar a la cancha a ver qué pasa. El CD Alcázar dará un nuevo paso en su historia esta tarde al debutar en una fase de ascenso con rumbo a LEB Plata. Lo hará tras una temporada de ensueño, la que debía ser para lograr la permanencia, y que ha acabado otorgando al exquisito grupo de Lluís Arbalejo la oportunidad de medirse ante el campeón del grupo catalán de EBA, el CB Santfeliuenc, en la lucha por ascender. Sinia Costabella volverá a rugir esta tarde, a partir de las 18 horas.
"Será un partido complicadísimo pero que afrontamos sin ningún tipo de presión porque se trata del premio a la labor de toda la temporada y lo primordial es disfrutarlo", explica Arbalejo. Para el técnico de Pontevedra "la eliminatoria no se decidirá en el primer partido, sino que la final será en Sant Feliu de Llobregat, a no ser que el partido termine con una diferencia entre los dos equipos mucho mayor de los 10 puntos".
El Alcázar se medirá ante un conjunto muy ofensivo, que en la fase regular ha rozado los 100 puntos a favor de media en cada partido, y que cuentan con un pívot, Brandon Brigman, que aporta 15,9 puntos y 9,5 rebotes, "uno de los más determinantes de toda la categoría". Arbalejo describe al Santfeliuenc como "un histórico, que cuenta con una plantilla importante, con experiencia, donde 7 u 8 jugadores llevan varios años juntos, el técnico cumple su tercera temporada y en todas se ha clasificado para la fase de ascenso".
Todos estos apuntes colocan al equipo del Llobregat como favorito, aunque la estrategia para obtener algo positivo, según Arbalejo pasa por "mantenernos fieles a nuestro estilo de juego rápido, descarado y agresivo" para contrarrestar el indudable carácter ofensivo del conjunto de Àlex Tarrès.
Sin bajas y a por todas
"Si salimos a especular con el resultado nos podemos llevar un buen disgusto", revela Lluís Arbalejo, que tendrá a toda su plantilla a disposición y que además reforzará el banquillo con los jugadores del filial Xavi Ainsa y Emi García. "No hay presión pero queremos seguir creciendo y saldremos a ganar la eliminatoria", apunta el bermellón.