El presidente de la Federació de Bàsquet de les Illes Balears, Jaume Estarellas, replica de modo contundente al CCE Sant Lluís. Veinticuatro horas después de que su homónimo en el club de Ses Canaletes, Rosendo Pons, señalara al ente federativo autonómico como el gran culpable de la no inclusión 'lluïssera' en el sector catalán de liga EBA con vistas a la temporada 2014/15, llega la contestación.
Pons, en estas páginas, en su edición de ayer y contextualizando en el 'caso Almería', habló de «agravio comparativo», acusando a Estarellas de no mover los hilos «necesarios» ante clubes y Federació Catalana en pos de Sant Lluís y Andratx; posteriormente, el club emitió un comunicado que confirmaba a su presidente. El primer rostro del bàsquet balear niega el extremo, asegura que incluso alcanzó un principio de acuerdo con el colectivo catalán, desbaratado «desde Menorca», y reta a presidente y directiva del Sant Lluís a «que me digan a la cara que no hice nada por ellos».
La polémica entre el Sant Lluís y la Balear, suscitada con el ascenso deportivo a liga EBA del conjunto menorquín, logrado en mayo -y la imposibilidad de consumar el mismo accediendo a un torneo de pleno rango estatal en detrimento de la EBA Balear, entendida como una Primera camuflada-, rebrota con un nuevo álgido. La raíz de este 'repunte de hostilidades' se origina con la petición del Almería, equipo andaluz, de disputar la conferencia valenciana de EBA, la del Sant Lluís para el segundo tramo competitivo de la temporada '2015, que contó con el respaldo de la Federación Andaluza y a la que también dio soporte el propio Sant Lluís.