«Dos no se juntan si uno no quiere». Este es el punto de vista inicial que expone el CB Ciutadella para detallar el momento actual del baloncesto en poniente, incapaz, por un motivo u otro, de cumplir con los propósitos de llegar a ententes de futuro. Tras declaraciones de intenciones públicas el pasado verano tanto del CBC como del CB Boscos sobre posibles e inminentes acuerdos o pactos, finalmente todo ha quedado en nada, y ni se ha presentado un sénior conjunto en EBA ni se ha podido salvar un problema en infantil masculino, obligando al club del 'poli' a juntarse con el CB Ferreries para salvar a los siete chavales que tiene de esta edad. Resultado: el Ferredella.
Situaciones o realidades en poniente que vuelven a dejar patentes las dificultades históricas de ambas entidades en ponerse de acuerdo en algún objetivo común; eso sí, pese a la cordialidad y señorío que reina entre ambos clubes. Y una verdad, un día a día, visto de diferente forma en casa de uno y otro vecino. Sin buenos ni malos, pero con un futuro de la mano a día de hoy prácticamente (im)posible a corto plazo, tal y como Miquel Rosselló (CB Ciutadella) y Víctor Taltavull (CB Boscos) dejan entrever en «Es Diari».
Cuenta el portavoz del club del Camí de Maó que durante estos tres últimos años, «hemos tendido la mano a alguna colaboración, con varias propuestas que no han fructificado. Taltavull coincide conmigo en que podríamos encontrar puntos comunes pero luego, por lo que sea, no fructifica, y no sé por qué», lamenta. Una relación más estrecha CBC-Boscos «con equipos que fueran más cortos de jugadores/as o el posible sénior. Hubo un pacto verbal de colaboración para sacar un sénior masculino nosotros y femenino ellos, colaborando mútuamente con júniors. Y luego deciden no sacar sénior, y lo respeto».
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