Tocado, pero no hundido. Es el sentir que anida en Bintaufa en relación a la situación del Hestia Menorca, que luego de las primeras cuatro jornadas en LEB Plata continua sin poder desempolvar su hoja de victorias ?al igual que Vic y La Roda, los otros dos conjuntos de la competición que tampoco han podido celebrar éxito alguno.
La última decepción, ocurrida el pasado sábado, la motivó el Arcos Albacete (58-60), capaz de revertir un diferencial de ?19 puntos en suelo insular que derivó en el 0/4 que actualmente presenta el equipo que dirige Oriol Pagès en su balance competitivo.
Ansiedad, falta de rodaje y de adaptación a la nueva categoría, problemas de anotación perimetral, baja producción interior, intermitencia defensiva, varios jugadores alejados de su versión más solvente? tanto en el plano psicológico como en el estrictamente deportivo ?en lo colectivo y en lo individual?, son varias las causas que se agrupan para conceder explicación al pobre arranque, en cuanto a resultados y sensaciones, que está ofreciendo el proyecto insular en la primera incursión de su historia en la tercera liga nacional.