A pesar de que la clasificación actual diga lo contrario, el Hestia Menorca visita este sábado noche a un Univestitat CB Vic muy parejo, recién ascendidos los dos a LEB Plata y en dinámica ascendente, adaptándose poco a poco al salto de categoría. En los de Osona, aún colistas, tras cesar a Dídac Herrero, cogió el banquillo, Raúl Laita, que lleva cinco jornadas al frente y ha logrado las dos primeras victorias del curso, ante dos grandes: Azuqueca y Murcia.
Partido trampa el de este sábado en el cierre de la primera vuelta para los de Oriol Pagès quien, en principio, recupera al pívot Andreu Matalí. «Tuvo molestias musculares en el anterior partido y preferimos no arriesgar. El martes ya entrenó y su evolución hace pensar que estará disponible», dijo el técnico de cara a un partido que podría consolidar al asentamiento del Hestia en LEB y lanzarlo en la lucha por estar en el grupo de arriba. Un Vic experimentado, con el tercer y cuarto mejor anotador, Kyle Beneton (15,5 puntos) y Julián Garrote (15,4), respectivamente; y dos más que suelen superar los 10 puntos por duelo, Pablo Rivas y Roger Fornàs, su mejor reboteador (6). El interior mallorquín Carlos Poyatos, autor de 10 puntos y 6 rebotes en el último triunfo en Maó, expresaba ayer a «Es Diari», de cara al trascendental choque de esta noche, que en el vestuario menorquín «somos conscientes que es un partido de vital importancia, más con el nuevo formato de liga, ya que la victoria, si estuviéramos en el mismo grupo que Vic, valdría doble. Obviamente, el triunfo nos pondría en la lucha por los seis primeros puestos».