El Hestia Menorca 2024-2025 mantiene algunos rostros de su pasado más reciente (leáse el capitán Diego Alderete, Pol Molins o Emil Stoilov), incluso perfiles como Golden Dike, incorporado en el tramo final del curso previo, el retornado Pablo González Longarela o el menorquín Raül Timoner (si bien estos dos últimos, de momento, no están inscritos en la relación de competición de la FEB), podrían considerarse como elementos de la ‘casa’, pero en esencia se trata de un equipo modificado en comparación al del curso previo, puesto que así lo sugiere la marcha de gente de la importancia de Hannah o Stevic.
Para armar el nuevo grupo, y sin omitir que desde el propio club se reconoce «estar atentos al mercado», el Menorca ha confiado la dirección desde el base al jugador catalán con pasado ACB Pol Figueras para que acompañe a Pol Molins (cada vez mejor en su proceso de recuperación).
El joven magiar Andras Tanoh Dez, con capacidad para hacer el ‘combo’, el experimentado ‘2’ búlgaro Ivanov, ambos fichados este verano, son otros recursos que se advierten en un ‘backcourt’ donde también aparecen los citados Timoner y Longarela (a quiénes el discurrir de la temporada determinará qué rol pueden alcanzar).
El capitán Alderete; el sueco Guillermo Falk, un joven diamante en su momento reclutado por el UCAM Murcia, con el que debutó en ACB; el internacional español U19 David Gómez, cedido por el Betis; y el serbio Marko Lukovic, que proviene del Maroussi heleno, resultan un ramillete de jugadores cada cual con sus características, pero con un denominador común; versatilidad, lo que permitirá diversas posibilidades tanto para el ‘3’ como para el juego interior.
Las tres ‘torres’ del equipo, Dike, Stoilov y Arteaga –este último se mantiene como una de las grandes referencias del equipo y como uno de los elementos con más impacto de la liga– completan la batería de pívots y por extensión la plantilla del Hestia Menorca 2025.