La directiva del Sporting Mahonés volvió a comunicar ayer a la plantilla que espera solucionar los problemas de liquidez que tiene el club en caja y que le hacen adeudar las nóminas de noviembre y diciembre del año pasado.
La solución llegará a través de las subvenciones y los convenios con las diferentes instituciones públicas, toda vez que la línea de crédito que tenía el club no fue renovada, tal y como le ocurre a tantas empresas y personas privadas en crisis. La temporada pasada el Sporting también pasó por un periodo de falta de liquidez que se pudo subsanar con un crédito de 200.000 euros.
En principio, el club asegura que a partir de Febrero normalizará los pagos mensuales, empezando por abonar la mitad de Noviembre. Es decir, que quedaría pendiente la otra mitad y Diciembre pero el resto de nóminas estarían al corriente. En cualquier caso, la intención es que a final de temporada todo esté satisfecho.
Por de pronto, en los próximos días los responsables del Sporting esperan ingresar alguna de las cantidades que están pactadas con las instituciones públicas, probablemente desde el Ayuntamiento de Maó y el Consell insular.
Habitualmente no hay establecido un calendario fijo de ingresos, aunque nunca ha finalizado una temporada sin que se hayan visto satisfechos los mismos. Por ejemplo, la cantidad dispuesta por convenio con la Fundació Illesport a cambio de lucir en la camiseta el logo "Menorca-Illes Balears" se ha venido cobrando en el mes de Marzo.
En total, entre fijos y variables, la totalidad de dinero público destinada al Sporting podría llegar a cerca de los 400.000 euros.
Sin embargo, en Bintaufa son conscientes que el club no debe funcionar a base de subvenciones públicas. Los dirigentes alegan que no hay desajustes de presupuesto (un millón de euros) y que se trata de un problema de liquidez para pagos inmediatos, lamentando que no haya una masa social suficiente (actualmente no llega a los 500 socios) que pueda sustentar a la institución. Por ejemplo, en el último partido ante el Sabadell tan solo se recaudaron 110 euros, cuando la tarifa que se debe abonar para el arbitraje alcanza los 1.400 euros.
"Era una gran oportunidad"
Resignado, pero sin tristeza por seguir en el Sporting. Así se manifiesta el delantero Marcos Jiménez. Confirmó a este diario que su agente recibió una oferta del Badalona y que el presidente Paco Segarra le negó "rotundamente" la salida. "No estoy enfadado, en absoluto, pero reconozco que deportiva y económicamente era una gran oportunidad", señala el delantero.
"El presidente me argumentó que de ninguna manera podía debilitar deportivamente al equipo y lo entiendo. Las salidas de Pedrito y Miquel Capó son totalmente diferentes. Tengo contrato hasta final de temporada y lo voy a cumplir". El mercado de invierno futbolístico finaliza el próximo lunes "y es lógico que el Badalona no vaya a abonar ningún traspaso".
Alejándose de cualquier polémica, Marcos reitera que "no tengo ningún problema con nadie del club ni con los compañeros. El objetivo es la salvación y lucharé para conseguirla lo antes posible. Lo que pasa es que Badalona era una gran oportunidad", incide.