La cita del domingo será ideal para nostálgicos, optimistas, valientes y todo aquel que quiera vivir 'in situ' una jornada a puertas abiertas y especial. El Sporting Mahonés se jugará el domingo ante el Alzira certificar la permanencia una temporada más en Segunda División en un choque que, a priori, debe ser el último en las vetustas instalaciones municipales y en el que no estará Iray, por lesión, y que serán duda el capitán José Ángel Moyano y David Sánchez.
El club mahonés quiere que para esta última cita en la que ha sido su casa desde su fundación el estadio muestre su mejor aspecto posible y registre la entrada más importante del campeonato para conmemorar el día y para que el público aliente a los jugadores que tendrán en sus botas certificar un curso más la Segunda B.
La premisa para que el Sporting pueda cumplir su tercer año consecutivo en Segunda B es que gane al Alzira o bien que empate y el Benidorm no gane al Alicante. En caso de derrota, los mahoneses deberían, como mínimo, puntuar en Gandía, en el último partido de la temporada, a expensas de lo que hiciera el Benidorm ante el Alzira en el duelo directo.
El único contratiempo que puede tener Joan Esteva, con respecto al once de la semana pasada, es la participación del lateral David Sánchez, que sufre una contractura en la zona isquiotibial y será duda hasta el último momento. Además, el centrocampista José Ángel Moyano arrastra molestias en el tobillo derecho, que no le impiden entrenar con el grupo, pero que está a la espera de ver cómo evoluciona. Iray, que ya lleva unas semanas en el dique seco por la rotura parcial en el ligamento lateral interno de la rodilla izquierda, tiene complicado volver a vestirse de corto esta temporada.
Concentración previa
Esteva convocará, para el sábado, a todos sus jugadores disponibles y, antes del partido, almorzarán juntos para concentrarse. Antes del partido, el catalán realizará los descartes.