Hay ocasiones en que las preguntas, siendo necesarias las respuestas, no hacen falta hacerlas porque los rostros lo dicen todo. La paciencia entre los jugadores y cuerpo técnico del Sporting podría ser infinita como infinita su profesionalidad a la hora de competir. Pero llega un nuevo final de mes, llegan los pagos de lo básico, y no hay ingresos.
El presidente Paco Segarra dio su palabra de que comunicaría las últimas novedades de sus acciones para encontrar un patrocinador salvador y a lo largo del día de hoy -posiblemente al final del entrenamiento matinal que habitualmente se programa para las once horas- está previsto un encuentro para el que la sensación es claramente pesimista, aunque siempre se deja un atisbo de esperanza por si, finalmente y por suerte, las conversaciones que el empresario ha mantenido en Barcelona hubieran llegado a buen puerto.
En ese sentido, desde la misma plantilla no se descarta que haya jugadores que no quieran esperar más y si las explicaciones se limitaran de nuevo a reiterar que no se ha logrado solucionar nada, y que se sigue pendiente de lo que digan las instituciones públicas, salgan del club, aspecto con el que Segarra siempre ha manifestado su comprensión.
Por lo que respecta a las subvenciones públicas, el presidente balear José Ramón Bauzá afirmó anteayer en el Parlament que este lunes presentará el proyecto de presupuestos para la Comunidad Autónoma del año 2012, aspecto ineludible para conocer cómo se van a desarrollar las aportaciones para los clubes. Pero esa situación puede estar llegando tarde para algunos jugadores, y pocas voces autorizadas estarían en disposición de volver a intentar convencer de que aguanten un poco más de lo que ya han aguantado. Si no hay soluciones la desbandada será inevitable.