El Penya Ciutadella interrumpió su dinámica positiva ayer en Magalluf en un campo que parecía propicio para mantenerla ante uno de los recién ascendidos. El equipo ciutadellenc no tuvo llegada y tampoco supo aprovechar la superioridad numérica durante casi 40 minutos.
Poco fútbol y mucho centrocampismo en la primera parte del encuentro en la que el Penya Ciutadella, con la ausencia de su técnico, Dani Mori, en el banquillo, sustituido por Lluís Simonet y Sergi Moll, no logró imponer su teórica superioridad ante el recién ascendido equipo mallorquín.
Los porteros pasaron bastante inadvertidos durante estos primeros 45 minutos, salvo los dos iniciales en los que, primero el Penya, por medio de Bote, y en el siguiente, el Penya, a cargo de David Camps, pudieron alterar el marcador en acciones claras.
Biel situado en el campo, el Penya no dejó maniobrar a su oponente aunque también le faltó determinación para irse arriba. En el minuto 35 los jugadores del Platges rodearon al árbitro protestando la anulación de un remate al fondo de la red, protagonizado, de nuevo por Bote. El trencilla estimó que se hallaba en fuera de juego.
Pero a dos minutos del descanso llegaría, ahora sí, el tanto legal del Platges. Bestard se adelantó a los zagueros del Penya en el saque de una falta y envió el balón al fondo de la portería.
En la reanudación no mejoró el juego de cara al espectador. El Penya no supo poner cerco a la meta local pese a que se le puso de cara el choque con la expulsión del local Willy por una agresión en el área a un jugador del Penya.
Pero los azules no osupieron aprovechar esta circunstancia. David Camps y Llonga tuvieron dos ocasiones claras, y poco después, Zurbano, que volvió a debutar con el equipo en el último cuarto de hora, tampoco acertó a batir al meta local cuando estaba en buena disposición para hacerlo.
Al final el Platges acabó pidiendo la hora pero pudo mantener el resultado favorable.