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Fútbol | Tercera División

El Ferriolense empuja al Penya al abismo

El equipo de Vadell, que acaba con diez, cae goleado y se complica la permanencia

Biel Medina corta el avance de Xisco en una imagen del partido de ayer. | MIQUEL A. BORRAS

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El Penya Ciutadella no pudo dar continuidad al trabajado punto conseguido ante el hasta ayer líder –Poblense– en la pasada jornada y salió goleado en su visita a Son Ferriol. Los menorquines, sin capacidad ofensiva, aguantaron poco menos de media hora, hasta que los de Son Ferriol anotaron dos tantos que rompieron el partido. En la reanudación lo intentaron pero el tercer tanto acabó con las pocas esperanzas que les quedaban de puntuar. En la recta final y con un jugador menos, por la expulsión del juvenil Juanjo, el equipo encajó dos nuevos goles que redondearon una goleada excesiva y que supone un paso atrás en sus aspiraciones de salvación.

El técnico visitante, Pere Vadell, planteó un partido a la contra, cerrando espacios atrás para salir en velocidad y sorprender al rival. El balón por lo tanto fue para los de casa, que tocaron y tocaron en busca de espacios. La mayor posesión no se tradujo en ocasiones claras pero en el minuto 27 Javito aprovechó una aproximación para desnivelar el marcador. Los visitantes trataron de rehacerse del golpe pero ocho minutos después encajaron el segundo, al contraataque. Tras un saque de esquina improductivo, un cambio de juego y un centro desde la banda fueron suficientes para que Xisco pusiera tierra de por medio en el marcador. El preparador de Es Mercadal ajustó la defensa en el tiempo de descanso –Stiven entró en el lateral derecho y Fabri pasó al izquierdo, un filón para los mallorquines en el primer acto– y alentó a los suyos para tratar meterse en el partido. Sin embargo, a los once minutos Cristian acabó con cualquier atisbo de reacción. Vadell movió el banquillo y retocó el dibujo en busca de la heroica pero la expulsión de Juanjo hizo la empresa aún más difícil. La última media hora, con el partido resuelto, sobró. Los de Son Marçal, sin esa garra y empuje que les caracteriza, encajaron dos goles más a poco del final, redondeando una mala tarde y escenificando un retroceso a la dinámica positiva de las últimas semanas.

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