A veces el fútbol deja imágenes muy tiernas de jugadores con los niños, pero también hay algunas escenas que enfadan mucho a los aficionados por la falta de sensibilidad de algún deportista profesional con los más pequeños. Uno de los episodios llamativos de los últimos días en el deporte rey ha llegado en la segunda división de Hungría y el protagonista ha sido el portero del DVTK, que provocó las lágrimas de un joven seguidor en los prolegómenos del partido que enfrentaba a su equipo con el Budapest, que ejercía de anfitrión. Al final, el karma jugó su papel
Antes del pitido inicial un joven aficionado del Budapest que celebraba su cumpleaños tuvo la oportunidad de vivir su sueño de marcar un gol en el Hidegkuti Nándor Stadion, donde se veían las caras los dos primeros clasificados en la carrera por lograr el ascenso a la máxima categoría. El niño corrió desde el centro del campo, pero se topó con la pierna del meta del DVTK Zsombor Senkó en el mano a mano. El joven seguidor local recogió el rechace y volvió a intentarlo, pero el portero visitante volvió a detener su lanzamiento y dio por zanjado el asunto mandando lejos la pelota. El pequeño acabó llorando por la situación y abandonó el terreno de juego en brazos de un jugador del Budapest.
El público expresó su malestar, igual que los usuarios de las redes, que también han celebrado que el karma actuara en el partido. Y es que el Budapest acabó llevándose la victoria marcándole cuatro goles al DVTK de Zsombor Senkó, que, además de encajar cuatro dianas (4-2), vio como los suyos perdían la primera posición precisamente ante su rival, el Budapest, que consumó la particular venganza hacia un portero que le negó un gol a un niño en su día y provocó sus lágrimas.