La temporada 2025-26 marcará un antes y un después para el fútbol base femenino. Desde la Federació de Futbol de les Illes Balears han anunciado la creación de ligas exclusivamente femeninas en las diferentes categorías del fútbol base. Dichas competiciones comenzarán a disputarse esta próxima temporada. Se trata de una iniciativa inédita en Menorca, tal como avanzó «Es Diari» hace unas semanas, y supone un avance importante para el desarrollo del fútbol femenino en la Isla.
Con la formación de estas ligas, la FFIB da un paso firme en su apuesta por el fútbol femenino. Para esta nueva etapa se han creado hasta tres competiciones específicas: Benjamín-Alevín (Fútbol-8), Infantil-Cadete (Fútbol-7), e Infantil-Cadete (Fútbol-11).
Equipos
El CE Ciutadella, UD Mahón, At. Villacarlos han confirmado la presencia de un equipo en las tres categorías Benjamín-Alevín (Fútbol-8), Infantil-Cadete (Fútbol-7), e Infantil-Cadete (Fútbol-11). Por su parte, el CCE Sant Lluís ha confirmado un equipo en Infantil-Cadete de Fútbol-7 y está intentando formar un Benjamín-Alevín.
Según los coordinadores de fútbol femenino de los clubes, esta competición supondrá un punto de inflexión para el fútbol femenino en la Isla. «El fútbol femenino está de enhorabuena: se están recogiendo los frutos del trabajo realizado y cada vez son más las niñas que quieren jugar», detalla la coordinadora de la UD Mahón Lorena Allés.
Situación
Hasta ahora, lo habitual era que las niñas formaran parte de equipos mixtos o se integraran en ligas masculinas, sin una estructura clara adaptada a su realidad.
En ese contexto, muchos clubes se encontraban con dificultades para ofrecer continuidad, lo que derivaba en una pérdida de interés o incluso en el abandono prematuro de la práctica deportiva. «Hasta ahora echábamos en falta una base. Al final, eran niñas que jugaban aquí y allá, dispersas. Y luego te las veías para encontrar jugadoras. Había que rebuscar para poder formar un equipo», señala Sam Martí, coordinador del CE Ciutadella.
Para Ignasi Dalmedo, del CCE Sant Lluís, esta falta de estructura también se traducía en una ausencia de referentes y estabilidad: «Muchas niñas jugaban en equipos mixtos o se encontraban con pocas opciones para competir con otras jugadoras de su edad y género. Esto provocaba una falta de referentes y poca continuidad en las etapas de formación».
La creación de ligas exclusivas permite generar un entorno más seguro, inclusivo y motivador para ellas, consideran.
Sentirse protagonistas
Los beneficios de este nuevo modelo no son solo organizativos. Todos los coordinadores coinciden en que la creación de estas ligas también servirá para que las niñas se sientan más reconocidas, arropadas y motivadas. «Para empezar tendrán una competición con mucho más protagonismo, más minutos y competirán con niñas de su nivel», apunta el coordinador del At. Villacarlos Felipe Gornés.
Lorena Allés lo ve también desde su doble perspectiva, como coordinadora y como jugadora del primer equipo de la UD Mahón: «Supondrá una motivación extra tener su propio espacio y despertar el interés de otras niñas. Las jugadoras que están hoy en la base serán las referentes del futuro».
El impacto de esta nueva estructura va más allá de las categorías base. Coordinadores como Sam Martí creen que esta apuesta tendrá repercusiones a medio plazo también en los equipos senior, que hasta ahora se veían obligados a formar plantillas a base de esfuerzo y de captar jugadoras ya formadas. «Tener una base sólida nos permitirá trabajar con más planificación. Las niñas que empiezan hoy pueden ser nuestras futbolistas de referencia dentro de unos años», asegura. En una temporada que supondrá un momento clave para el fútbol femenino en la Isla.
ya están tardando algunos y algunas en tocar a jugadoras de otros clubes