Tarde típicamente otoñal que animaba a acudir al Estadio Mahonés, al que acudía tambien el RCD Mallorca, uno de los favoritos del grupo. En esta ocasión Luis Vidal con una alineación lógica, dada la ausencia por sanción de Sergi, realizó un perfecto planteamiento táctico y mantuvo un magnífico orden sobre el campo, con unos jugadores muy bien situados y una presión agobiante, capaz de anular al rival, un equipo teóricamente muy superior, que mientras los menorquines contraatacaban con peligro, solo tuvo dos ocasiones de gol una en cada tiempo.
El 0-1 del descanso era totalmente inmerecido y en la segunda parte, con un despliegue físico extraordinario –se nota la mano de ese gran preparador que es Tolo Roselló– el Menorca fue muy superior y consiguió un triunfo importante muy merecido.
Marc Urbina demostró de nuevo su gran calidad con un extraordinario gol, así como Xisco Martínez, en un genial lanzamiento de falta directa, aunque es de justicia en esta ocasión, destacar a todos los jugadores que salieron al terreno de juego. Su encomiable entrega les hizo acreedores a un triunfo indiscutible. En suma, un partido de los que hacen afición y una gran victoria para la esperanza. Jugando así la permanencia estará asegurada. ¡Amén!
Posdata.- Lástima la coincidencia de fecha y hora de los partidos de juveniles en Mahón y Villacarlos. Como aficionado al fútbol espero que las directivas respectivas hayan tomado nota para que este hecho no se vuelva a repetir. ¡Así sea!