El clásico de las palas en la playa ha evolucionado sustancialmente. El tenis playa es una realidad que poco a poco va desembarcando en Menorca de la mano de la empresa MPTour y que va ganando adeptos, la mayoría venidos de la versión mediática que comparten Rafa Nadal y Roger Federer, por ejemplo, así como del pádel.
"Los tenistas tienen más ventaja, el saque no es tan importante y se ven muchos 'smashes'", avisa Frans Martín, uno de los impulsores de esta modalidad que se estrenó oficialmente el verano pasado en las playas menorquinas y que para este tiene previsto tres pruebas además del máster que se disputará, en principio, en septiembre en el arenal de Cala en Porter.
El tenis playa, como deporte reconocido, tiene su correspondiente libro de reglas en el que destacan los puntos que afectan a que la pista debe medir 16 metros de largo por ocho de ancho, la red debe estar a 170 centímetros del suelo, a la pelota con la que se juega se la conoce como 'de punto verde', un poco más blanda que las de tenis y se juega en parejas.
Otra peculiaridad es que para esta modalidad del tenis existen unas raquetas exclusivas para la playa, similares a las de pádel, ya que no tienen cuerdas, pero la mayoría de menorquines que acuden a estos torneos lo hacen con sus palas de pádel sin ningún inconveniente por parte de la organización.
La mecánica del juego es similar a la del tenis, el objetivo es intercambiar golpes intentando que la pelota toque el suelo en el campo contrario. El tanteo es el mismo, 15, 30,y 40, igual que el mecanismo de puntuación, el primero en llegar a seis juegos gana el set.
"Durante el juego se ven más globos y 'smashes', la táctica es más directa porque lo importante es el movimiento de muñeca", añade Martín, reconocido jugador de pádel. "Un primer objetivo es el de hacer correr al adversario para cansarlo porque es distinto moverse en una pista de hierba o de tierra que hacerlo en la arena", sostiene.
El año pasado, las playas de Menorca acogieron tres pruebas que tuvieron una excelente respuesta. Para este verano MPTour tiene previsto hacer tres pruebas más, cronológicamente en Son Xoriguer, Cala Galdana y Punta Prima, además de la competición final en Cala en Porter.
"Por el golpeo se parece más al tenis que al pádel, pero la verdad es que los jugadores de pádel son los que han cogido este deporte con más afición", desvela Martín.
El tenis playa poco a poco va cogiendo peso en los arenales menorquines y se espera que el número de participantes se incremente a medida que pasen los veranos.