El grueso de las federaciones deportivas de Balears han optado por echar el cierre para evitar posibles contagios del COVID-19, siguiendo así las recomendaciones del personal sanitario y las autoridades de las Islas. A través de sus cuentas en las redes sociales, sus páginas web y mediante circulares internas, las territoriales han informado a los diferentes estamentos de la medida tomada y las diferentes vías de contacto posibles, pues estas entidades no han detenido su actividad por completo, a nivel administrativo.
Federaciones como baloncesto, natación, ciclismo, atletismo, actividades subacuáticas, e incluso la Federació de Futbol de les Illes Balears (FFIB), la que más licencias maneja, mantiene abiertas sus instalaciones provisionalmente, pero insta a sus adscritos a que cualquier trámite, salvo que sea de extrema urgencia, se realice telefónica o telemáticamente.
Las delegaciones insulares (Menorca, Eivissa...) siguen los mismos protocolos marcados por las sedes centrales. Pese a que las actividades competitivas están detenidas, al menos por espacio de dos semanas en territorio balear, la labot burocrática y administrativa continúa activa.
La sede de muchas de esas federaciones se encuentra en el Velòdrom Illes Balears, cuyo acceso ha sido limitado por parte del Govern, estando únicamente permitida la presencia al personal autorizado, trabajadores de las entidades públicas allí presentes y personas con contrato en vigor.