"No fue nada distinto a lo que me esperaba. A nivel técnico y táctico observé lo previsible", asegura el técnico del Valeriano Allés analizando estrictamente los primeros resultados del "experimento forzado" que supone "inventarse" una opuesta. El primer partido en el que pudo hacer pruebas fue el sábado pasado ante el Cantabria Deporte (3-0), un duelo en el que, hablando de todo, "no fue complicado, pero no me gustó nada perder 19 balones en ataque, aunque eso no se dio por la reestructuración".
La figura en la que recae preferentemente el "experimento" es la brasileña Sabrina Duarte, una jugadora que, hasta el momento y también en Cantabria, su ex-equipo, se había ejercitado como central.
Rodríguez observa dos elementos que "habrá que valorar exactamente en cuanto a necesidades durante el Play-off". Por un lado, y eso sería lo positivo, "ganamos estabilidad en la recepción, e incluso más velocidad". Por otro, y es lo negativo, "sufrimos cuando el balón se divide".
Este último aspecto "es muy complicado de arreglar. Se puede pulir, pero es una jugadora que por sus características, difícilmente variará el hecho de que le cuesta muchísimo atajar balones por alto". A pesar de ello, valora que "ganamos en la red, es cierto", pero, por supuesto, "necesitamos trabajar más, tener más tiempo. Nos quedan dos partidos antes del play-off. En estas dos semanas y la que quedaría antes del primer partido tras la fase regular tenemos que encontrar un punto justo".
Por supuesto, hay algo que el técnico de Albacete tiene clarísimo. "No voy a mover al equipo. Sabrina por Liz es puesto por puesto. Para variar en más jugadoras debería ganar más que lo que pierdo. Por eso no tocaré piezas", sentencia.