El Avarca de Menorca no pudo anoche con un gran Hidramar Gran Canaria, ante el que sufrió la segunda derrota de la temporada, y también seguida tras el tropiezo europeo, poniendo en riesgo el liderato a la espera de los resultados de otros partidos de la jornada.
El encuentro comenzó con una Saray Manzano hiperactiva. La capitana del conjunto local acaparó las primeras acciones de ataque de su equipo logrando las primeras ventajas en el marcador (6-3). Fallaba más de la cuenta el equipo dirigido por Bep Llorens, al que parecía que le faltaba intensidad. Tras el 7-3 el técnico balear solicitó tiempo muerto para hacer reaccionar a sus jugadoras. No lo consiguió, ya que el marcador se fue hasta el 11-5. Entonces apareció la figura de Marcela Amaral. Cuatro acciones suyas hicieron que Fran Carballo pidiera su primer tiempo muerto (11-9).
Amparado en Matienzo y Saray Manzano, el Hidramar Gran Canaria volvió a escaparse en el marcador, esta vez de forma definitiva. Un parcial de 14-6 cerró el primer set con dos gorros de Castellano y un contundente 25-15.
En la segunda manga, De Blas cedió su puesto a Carla Jiménez, buscando más centímetros en la red. Tras un comienzo errático (3-0), el Avarca aprovechó un pequeño bajón en el rendimiento del conjunto grancanario para ponerse por primera vez por delante en el marcador (4-5). Marcela Amaral tiró de sus compañeras y el juego se mantuvo igualado. Matienzo puso la réplica, con ayuda de Pereira y Saray Manzano. El conjunto menorquín echaba de menos los puntos de Jimena, que volvió a la cancha tras unos buenos minutos de Orozco.
El set avanzó con igualdad. Cualquiera de los dos equipos podía ganarlo. Se llegó al 22-22 y, una genialidad de Mariale al segundo toque y un remate de Beatriz Suárez pusieron el punto de set para su equipo. Lo salvó Marcela Amaral, quién si no, antes de que Davenport estrellara su saque en la red poniendo el 25-23 definitivo.
Despertó el líder en la tercera entrega. Tras el empate a dos, un parcial de 1-7 pareció romper el set (3-9). Paró el partido Fran Carballo, que no quería que el Avarca se creciera. Apareció, poco a poco, la argentina Fortuna, un tanto apática hasta entonces. La defensa de la escuadra menorquina subió su nivel y eso permitió contraataques para sumar puntos.
Novoa sustituyó a una cansada Matienzo y el ataque local se resintió. Solo Saray Manzano y Pereira puntuaban con cierta asiduidad (12-16). Marcela Amaral, con un remate y dos saques consecutivos puso el 12-19 que dejó sentenciado el set, antes de irse al banquillo por unos problemas en un gemelo. El tercer capítulo concluyó con un contundente 15-25.
Un parcial de 5-0 marcó el devenir de la cuarta manga. El cansancio por los partidos europeos y el viaje penalizó más al Avarca. Saray Manzano olió la sangre y con tres puntos seguidos puso el 11-3. Después, tras hacer el 15-6 con un bloqueo, se retiró lesionada, pero el set estaba decidido y acabó con 25-16.